Diario de un padre primerizo: cómo elegir la mejor cuna para tu bebé
En esta sección quiero contarte todas mis experiencias como papá primerizo, empatizar contigo, ofrecerte consejos que voy aprendiendo y contarte los errores que llegué a cometer
¿Ves el enorme oso de peluche que está en la cuna? Pues sácalo inmediatamente. Primera lección: este tipo de objetos elevan el riesgo de muerte súbita del lactante, por asfixia. Crédito: Shutterstock
¡Hola, hola! ¡Papá primerizo! Pregunta seria: ¿Siguen durmiendo con el bebé en la cama? De ser así, ni te preocupes, porque es una situación que la mayoría de los padres vivimos. Mira que antes del nacimiento decíamos “nuestro hijo en la cuna, la cama es para nosotros”, y ahora luchamos para que se quede en ella. Aquí te dejo algunos tips para conseguirlo.
Pero además del proceso que implica conseguir que tu bebé duerma en la cuna, hay un detalle fundamental: elegir la mejor.
Está bien que lo primero que te atraiga es el diseño, lo que no deja de ser importante, pero hay otros factores que están por delante. En mi caso, mi esposa y yo decidimos que lo más estratégico era un corral-cuna, de modo que la siga utilizando hasta después del año.
Fue nuestra decisión, no quiere decir que es la más correcta para ti, pero podrías considerarlo.
También es recomendable que te fijes en el precio, porque las cunas que son demasiado costosas en una tienda, podrían tener un costo mucho más accesible en otras, incluso en una tienda online. Tampoco te dejes arrastrar por una oferta engañosa, pero ten cuidado una cifra inflada.
Múltiples cunas traen ruedas, un cambiador, adornos, mosquitero, pañalera y hasta una caja musical, detalles que van elevando el precio. Es probable que sientas que todos son indispensables, pero el consejo más honesto que puedo darte es que no te emociones.
Verifica muy bien qué es lo que necesitas para tu bebé cuando esté en la cuna. Las ruedas suelen ser muy prácticas, pero el cambiador ocupa valioso espacio, dependiendo del tamaño de la habitación. Y el mosquitero, evidentemente, es para evitar que le piquen.
Para que tengas el panorama más claro, te dejo una lista de tips que decidí aplicar y otros que me hubiese gustado hacerlo. Apúntalos ahora:
5 tips para elegir la mejor cuna para tu bebé
Si tienes ruedas, también frenos
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Para facilitar su movilización, algunas cunas traen ruedas, pero es indispensable que traigan sus respectivos frenos para evitar un accidente.
Prueba los frenos y procura que sean muy resistentes, ya que en algún momento tu bebé logrará pararse y podría deslizarse cuando salte o camine sobre ella.
Los barrotes deben tener una distancia lógica
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Deben tener un máximo de 6 o 7 centímetros, para evitar que tu bebé meta la cabeza entre ellos, o lo que es peor… que se quede atorada su cabecita.
Asimismo, verifica que estén protegidos con algún tipo de goma u otro material suave, de modo que no se golpee. Yo no me di cuenta de ese detalle y tuve que implementarlo.
Una estructura resistente
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Si bien no tiene que pesar una tonelada, tampoco significa que se desestabilice con cualquier movimiento. Tiene que ser rígida y con materiales resistentes.
Y fíjate en la altura, que debe ser unos 60 centímetros (sin incluir el colchón) para que el bebé no pueda salirse, ya que en el intento podría golpearse muy fuerte.
Si los bordes son móviles, es decir, se suben y bajan, cuida de que siempre estén arriba con el seguro puesto. No te fíes de tu bebé, porque la cuna será su espacio personal y a medida que crece va a curiosear por cada rincón.
El colchón tiene que encajar perfectamente
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Generalmente, un corral-cuna viene con su colchón, el cual se adapta a las medidas en cada esquina.
No debe tener una altura mayor de 10 centímetros, y por supuesto que sea muy cómodo para el descanso de tu bebé.
Es imprescindible que el colchón se ajuste perfectamente al tamaño de la cuna, para evitar que queden huecos en los bordes.
Cuidado con alguna pintura tóxica
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Esta situación es más probable con una cuna heredada, de segunda mano, o que algún amigo te haya regalado. Y la razón es que querrás ponerla como nueva, usando pinturas y barnices.
Cuida de que los materiales no contengan sustancias tóxicas, porque tu bebé se acostumbrará a chupar o morder la cuna en algún momento.
Asimismo, vigila que no queden astillas, algún clavo en mala posición o una zona de los bordes que esté afilada. Ese detalle podría ser más peligroso de lo que imaginas.
Desde la sección de comentarios, comparte con nosotros y otros lectores cómo fue tu experiencia como padre primerizo, al comprar la cuna de tu bebé. También te invitamos a ofrecer más consejos y anécdotas.
