7 reglas para desescalar conflictos con tu pareja, amigos o familia
En cualquier ámbito es posible que una situación escale y se salga de control
Recuerda que si estás en una situación en la que te sientas físicamente amenazado debes llamar a la Policía. Crédito: Pexels
Los conflictos son un elemento natural de la interacción humana y en sí, no son malos. Mala puede ser la gestión que le damos a esos desacuerdos. Por eso, te decimos 7 reglas para desescalar conflictos con tu pareja, amigos (o no tan amigos) y familia.
El problema de las discusiones radica en que un desacuerdo altere las emociones de los involucrados, se salga de control, y se comiencen a pronunciar palabras hirientes o sinsentido.
Previamente, hemos escrito sobre con qué frecuencia es incluso saludable discutir con tu pareja, dos estilos de discutir que pueden generar conflicto; 6 errores al discutir con tu pareja por WhatsApp y que ponen en riesgo tu relación; las mejores maneras de discutir con tu pareja: cómo hacerlo de modo que en vez de desgastarlos, los fortalezca; 5 banderas rojas al discutir con tu pareja para salir corriendo de esa relación; las 3 frases que jamás debes usar al discutir con tu pareja y una de ellas puede acabar con todo; e incluso cómo dejar de discutir con tu pareja con un amarre de amor casero: experta lo comparte en TikTok.
El tema de relaciones es más complicado porque se trata de las personas con la que convivimos, los amigos son aquellos que nos apoyan; la familia son esas personas que no podemos simplemente “sacar” de nuestra vida y los compañeros del trabajo o jefes son simplemente los que nos tocaron por buena o mala suerte.
En cualquier ámbito es posible que una situación escale y se salga de control. Para ello, el doctor Kevin Bennett, profesor de enseñanza en psicología social y de la personalidad, coordinador del programa de la licenciatura en psicología en la Universidad Estatal de Pensilvania, aseguró en su columna para Psychology Today que 7 reglas para desescalar conflictos comprobadas por la ciencia.
1. Presentar una apariencia no amenazante
El impacto de un mensaje es 7% de lo que decimos, 38% vocal (en referencia al tono, los matices y otras características) y un 55% señales y gestos. Naturalmente, una persona que está molesta tiende a tener el cuerpo tenso, los puños o la mandíbula apretada, elevar el tono de voz, pasear inquieto.
Para poder desescalar necesitas mostrarte diametralmente opuesto a eso, es decir, con una apariencia no amenazante. Tranquilo, confiado y sin apuntar a nadie.
2. Establece una conexión personal
La gente responde positivamente a su propio nombre y hace que el diálogo sea más personal. Si hay cierto grado de confianza, puedes empatizar a través de la validación.
Y si no conoces mucho a esta persona puedes decir algo como: “Pareces una persona confiable y trabajadora. Vamos a resolver esto”.
3. Escucha
Las personas que se dejan llevar por la ira a menudo lo que quieren es ser escuchadas. “Incluso si no estás de acuerdo con la posición de la otra persona, será útil mostrar una comprensión de por qué se siente de una manera particular”, expuso Bennett.
Recomendó hacer preguntas aclaratorias, parafraseadas y abiertas, que ayudan a garantizar que la persona sepa que has entendido sus frustraciones por completo.
4. Determina acciones para el futuro
Establecer acciones para el futuro, así sea inmediato, puede ayudar a la persona que está haciendo conflicto a salir de la discusión acalorada.
Se trata de decir: “resolvamos esto” o “¿Qué puedo ofrecerte? Te conseguiré un poco de agua si quieres”. Las oraciones con que comiencen con la palabra “vamos” son una excelente idea.
5. Haz que digan sí
Buscar que la persona con la que intentas desescalar un conflicto diga que “sí” es una excelente herramienta del clásico de Dale Carnegie en “Cómo ganar amigos e influir en las personas”, publicado por primera vez en 1936. Es más difícil para alguien permanecer enojado si está de acuerdo contigo.
Lo que ocurre es que se percibe como si le estuvieras haciendo un favor a la persona o las personas alteradas. “¿Te importa si involucro a alguien más de inmediato para que resolvamos el problema lo más rápido posible?” O también: “¿Está bien si tomo notas?”.
6. No iguales su intensidad
Es difícil decir que no te molestes con una persona que está siendo agresiva contigo, pero hacerlo solo empeorará la situación. Por el contrario, trata de mantener la calma para ayudar al otro a navegar la escena de manera segura. Toma una respiración profunda. Usa un tono de voz bajo y aburrido y no te pongas a la defensiva, incluso si los insultos están dirigidos a ti.
“Recuerde que el objetivo aquí no es ganar la discusión; es diluir la situación para que ambas partes logren una resolución exitosa”, destacó Bennett.
7. Sé consciente del ambiente
Si notas que una situación está escalando y se está saliendo de control. Escanea la habitación o el lugar en el que te encuentras e identifica tus salidas en caso de emergencia.
Recuerda que si estás en una situación en la que te sientas físicamente amenazado debes llamar a la Policía.
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