Ver películas de terror con tu pareja fortalece la relación… y el sexo, revela estudio
Un estudio publicado en el Journal of Consumer Research explica que, durante una película de terror, la sensación de estar asustado nos hace liberar dopamina, hormona ligada al amor y deseo sexual
Sentirnos vulnerables en una película de terror nos incita a abrazar a la pareja, lo que fortalece la relación y la sexualidad. Crédito: Freepik
En un artículo anterior hablamos sobre las películas románticas y las 3 razones por las que pueden perjudicar tu relación amorosa. Pero ahora nos mudamos a las de terror, porque de acuerdo a la ciencia este género sí tiene efectos positivos cuando las disfrutas con tu pareja. ¿Cuántas veces no quisiste que tu novio te abrazara en una escena de espanto? pues esto es solo el principio de los beneficios que pueden ofrecer al verlas juntos.
Un estudio publicado en la revista Journal of Consumer Research reveló por qué este tipo de películas generan un acercamiento entre los dos miembros de la pareja. De hecho, no solo fortalece tu relación, sino también la sexualidad.
Según el grupo de psicólogos que lideró la investigación, al verlas se viven niveles altos de ansiedad y miedo, síntomas que también se presentan en la excitación, reseñó Life and Style.
En términos biológicos, una película de terror se traduce en la sensación real de estar asustado, lo que provoca que tu cerebro libere dopamina. Esta sustancia química, entre sus funciones, es la que nos hace sentir amor y deseo sexual, además del placer. Como verás, del miedo al sexo hay poco trecho.
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Los efectos de la película de terror y la confianza con tu pareja van de la mano
Claramente no todo el crédito se lo puede llevar un proceso químico, hay otros factores humanos que son determinantes para obtener dichos beneficios. Cuando vemos una película de terror nos sentimos vulnerables, ya que estamos afrontando una trama donde sabemos que algo malo pasará. Por tal motivo nos tapamos los ojos, se nos acelera el corazón y hasta buscamos algo (o alguien) con que refugiarnos.
Precisamente esa vulnerabilidad es lo que te hace abrazar o pedir un abrazo de tu pareja, acto de amor y protección que lo determina la confianza que tengan. Si efectivamente la hay, estos gestos cariñosos fortalecen la relación. Y por si fuese poco, aunque no se trate de un peligro real, después o durante la película podría abrirse una charla sobre los miedos, que indudablemente es un tema íntimo.
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Entre más tensión haya en la película, más fuerte será ese deseo de acercarte a tu pareja, mientras que la adrenalina y dopamina recorren todo tu cuerpo antes de una incitación al sexo.
Pero ojo con el tipo de película. No es lo mismo ver la tercera entrega de El Conjuro o El Exorcista, obras de arte cinematográficas del género terror, que optar a un thriller como La masacre de Texas, que para algunas personas tiende a ser desesperante y desagradable. Esos detalles podrían cortar cualquier efecto, así como el tiempo de duración o las interrupciones.
