Cómo elegir la mantequilla de maní más saludable: 3 consejos de expertos
La doctora Julie Balsamo, dietista registrada y experta en salud metabólica, explica que al elegir una mantequilla de maní, optes por una que tenga mínimos ingredientes: maní y sal, pero hay otras claves que debes considerar
Está bien que te dejes guiar por las mejores marcas, pero al elegir una mantequilla de maní también debes fijarte en la etiqueta y otros detalles. Crédito: Shutterstock
La mantequilla de maní es un alimento exquisito, por lo que después de comprarlo, merece que le des la mejor conservación en casa. Pero también es fundamental que sepas cuál producto elegir, de modo que te lleves del supermercado la más saludable.
Julie Balsamo, dietista registrada y experta en salud metabólica, explica que al seleccionar una mantequilla de maní, optes por una que tenga mínimos ingredientes: maní y sal. Pero cuando azúcares y aceites agregados, algo no está del todo bien.
“Busque variedades naturales para evitar aditivos o conservantes innecesarios, y revise las etiquetas que indiquen que no contienen aceites hidrogenados ni grasas trans”, recomienda.
3 consejos al elegir una mantequilla de maní
Dale un vistazo a la etiqueta
1
La doctora Leah Johnston, dietista certificada en nutrición culinaria con experiencia en investigación y nutrición de salud cognitiva, apunta que debes fijarte en la parte posterior de cualquier frasco de mantequilla de maní, fijándote en la presencia de sodio y azúcar añadida.
Asimismo, darle un vistazo a la lista de ingredientes te ayudará a comprender más sobre algunos aditivos, los cuales funcionan para alagar la vida útil del producto.
Fíjate en las calorías totales
2
En números precisos, lo correcto es que haya un aproximado de 190 calorías por porción de dos cucharadas. Según expertos, es el recuento estándar de calorías que contiene una mantequilla de maní elaborada con calidad, es decir, 100% maní.
El azúcar añadida no es opción
3
Al igual que la textura cremosa y el color característico, otra clave de la mantequilla de maní en el sabor, siendo seco, un poco amargo y, bueno, maní.
Pero si le sientes un sabor francamente dulce, arruinando la experiencia del sabor, definitivamente no es la mantequilla de maní que deberías llevarte a casa nuevamente.
En definitiva, busca lo que refleje salud: pocos ingredientes, es decir, solo los necesarios, una cantidad moderada de calorías y la inexistencia de azúcares y otros aditivos que le resten calidad, sabor y condición saludable.
La información contenida en este artículo es solo para fines educativos e informativos y no pretende ser un consejo médico o de salud. Siempre consulte a un médico u otro proveedor de salud calificado con respecto a cualquier pregunta que pueda tener sobre una condición médica u objetivos de salud.
