5 Aceites esenciales que sirven para superar la ansiedad
Algunos aceites esenciales son conocidos por sus propiedades relajantes y pueden ser especialmente útiles para reducir el estrés y la ansiedad
Cuando hablamos de depresión, entramos en el contexto de una patología muy grave y muchas veces tortuosa.
Por supuesto debe ser abordada con las herramientas correctas por profesionales en el campo. Sin embargo, algunos remedios naturales pueden usarse para apoyar los tratamientos, incluidos los aceites esenciales.
Estados de astenia, agotamiento psicofísico e incluso depresión pueden surgir más fácilmente en el cambio de estaciones.
Por ejemplo termina la escuela, termina un ciclo de estudios de cinco años y la vida cambia de alguna manera. Comienza el calor tórrido, uno se siente cansado, vacío.
Desde la experiencia de Aurum Wellbeing te recomendamos estos 5 aceites esenciales para la depresión.
1. Aceite esencial de Toronjil o Melisa
Su nombre en griego significa «hoja para abeja». Para los antiguos, el toronjil era una planta que con sus energías solares participaba en el proceso vivificante de la miel. Se empleaba para ahuyentar los malos estado de ánimo y la melancolía.
El aceite esencial de melisa actúa sobre el sistema nervioso con un efecto relajante pero también tonificante. Además está indicado en casos de estados depresivos por trauma emocional.
Tiene un efecto reequilibrante, calma los excesos, fortalece la personalidad y controla la emocionalidad.
Para ser utilizado en la habitación: 5 gotas en un difusor con agua caliente.
Para uso interno: 1 ó 2 gotas en una cucharada de miel con un té de lima.
2. Aceite esencial de lavanda
El uso de la lavanda se ha transmitido a lo largo de los siglos y continúa hasta el día de hoy. Es sinónimo de higiene, limpieza, purificación.
El aceite esencial de lavanda es un excelente antiinflamatorio, descongestionante. Se puede utilizar tanto en estados de ansiedad, estrés, nerviosismo, como en estados de melancolía, apatía, tristeza.
Baño de lavanda aromática: 3 o 4 gotas en el agua del baño por la noche, para reconciliarse con el equilibrio y purificarse de los agobios del día.
En el difusor como aromaterapia ambiental: 5 gotas.
3 o 4 gotas en un aceite portador para untar sobre el cuerpo después del baño.
3. Aceite esencial de pino silvestre
El aceite esencial de pino silvestre está indicado para estimular y dinamizar en caso de cansancio, apatía, depresión.
Su acción repercute en la corteza suprarrenal para la producción de hormonas para apoyar el cuerpo contra el estrés y los momentos de fatiga psicofísica.
Es un remedio con fuerza masculina: calibra y fortalece la personalidad, fortalece la autoestima y es un buen reenergizador sexual.
Para difusión en ambientes: 5 gotas.
Baños o duchas aromáticas: para diluir en un gel de ducha neutro o en una cucharadita de aceite de oliva para masajear sobre el cuerpo (3-4 gotas).
Aplicaciones localizadas: 2 gotas en las muñecas o palmas.
4. Aceite esencial de jazmín
Siempre reconocido como la esencia del optimismo y la confianza, el aceite esencial de jazmín es una valiosa ayuda en la lucha contra la depresión.
Con un aroma persistente y floral, reduce la tensión, favorece el sueño, mejora su calidad y alivia las migrañas.
El aceite de jazmín se usa localmente en la piel o se esparce en el medio ambiente.
5. Aceite esencial de naranja
La propiedad más destacada e interesante de esta esencia es su capacidad antidepresiva. Su uso, en algunos sujetos, ha supuesto una importante reducción del consumo de psicofármacos.
El aceite esencial de naranja también actúa sobre los sistemas endocrino e inmunológico, restableciendo sus equilibrios alterados.
Con su aroma fresco y afrutado, el aceite de naranja se utiliza tanto localmente, para difusión ambiental, como por vía oral.
En caso de fricción del aceite sobre la piel, se recomienda proteger la parte de la exposición directa a la luz solar durante al menos 12 horas después de la aplicación.