6 alimentos que jamás debes meter en el congelador

Gracias al aporte de dos expertos, una nutricionista y un chef profesional, te contamos cuáles son esos alimentos que jamás debes llevar al congelador

Cuáles son los alimentos que nunca debes meter en el congelador.

Por lo general, todos los alimentos que pueden ir al congelador deben estar sellados en una bolsa o empaque, para que no reciba el frío directo. Crédito: Shutterstock

Cuando vas a meter aves y carnes en el congelador, hay métodos correctos para conservarlas y también existe un tiempo específico que duran en buen estado. Sin embargo, hay otros alimentos que definitivamente no puedes poner allí, no solo porque podrían perder la textura, el sabor y su valor nutricional, sino también se vuelven propensos a acumular bacterias.

Gracias al aporte de dos expertos, una nutricionista y un chef profesional, te contamos cuáles son esos alimentos que jamás debes llevar al congelador. Quizás pensarías que allí se conservarán por tiempo indefinido, pero la realidad es que lo estarías “tirando a la basura”, porque vas a perderlo.


Cuáles son los alimentos que nunca debes meter en el congelador

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Comida frita

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Cuando fríes un alimento y luego lo depositas en un congelador, terminará empapado, por lo que automáticamente perderá su textura crujiente.

Asimismo, la nutricionista Melissa Baker, fundadora de foodqueries, señala que también es probable que ese alimento pierda su sabor, volviéndose mucho más insípido.


Pasta ya cocinada

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¿A quién no le ha sobrado pasta o arroz al momento de cocinar? Sin embargo, en el caso de la pasta, congelarlo no es una opción recomendable.

“La textura de la pasta cambia cuando se congela, se vuelve blanda y pierde su textura masticable”, advierte la experta. Si bien hay algunos productos que se recuperan, es mejor que te aprendas la cantidad correcta o lo guardes en la nevera para consumirlo un poco más tarde.

En cuanto a la salsa que suele llevar una pasta, también te aconseja guardarla por separado, ya que al calentarlos nuevamente, van a necesitar diferentes tiempos y temperaturas.


Huevos en su cáscara

3

Congelar un huevo en su cáscara es literalmente perder el alimento, puesto que el frío lo abre, se vuelve incomible y hasta se contamina.

Distinto es cuando vacías el contenido en un recipiente hermético y lo llevas al congelador. Cuando vayas a usarlos, tan solo debes batirlos y listo.


Alimentos que contienen agua

4

Se trata de cualquier verdura o fruta que sea rica en agua, por ejemplo: pepinos, lechuga, sandía y otras opciones. Además, perderán su textura crujiente.

La nutricionista Melissa Baker señala: “El alto contenido de agua en estas verduras hace que se marchiten y se vuelvan blandas cuando se congelan”.

Lo mismo sucede con las papas. Según el cocinero Ethelyn Dietrich, chef profesional en cookerquery, congelar las papas entera hace que pierden su consistencia y valor nutricional.


Carnes que ya fueron descongeladas

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Cuando descongelas una carne, y aquí te dejamos los métodos correctos para hacerlo, nunca debes llevarlo nuevamente al congelador. Esto va a alterar el sabor y facilitará el crecimiento de bacterias.

Asimismo, te recomendamos que una vez que descongeles el alimento, inspecciones cualquier tipo de deterioro, como quemaduras por congelación, cambios en su olor, textura y color.


Quesos blandos

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Congelar un queso blando hace que se desmorone y pierda su textura, ya que el frío excesivo le resta a su estructura molecular. Para que no te suceda, es preferible que compres las porciones correctas y consumirlos pocos días después.

Por su parte, los quesos duros no suelen tener el mismo problema, aunque si vas a congelarlo, te recomendamos hacerlo desde su empaque original. En esas condiciones, deberían durar hasta tres meses en el congelador.

Antes de meter un alimento en el congelador, piensa si realmente es conveniente, si vas a utilizarlo más adelante y cómo vas a hacer para descongelarlo. En muchos casos, es preferible refrigerarlo y tratar de usarlo ese mismo día o al siguiente, de modo que no te veas en la necesidad de botar comida.


La información contenida en este artículo es solo para fines educativos e informativos y no pretende ser un consejo médico o de salud. Siempre consulte a un médico u otro proveedor de salud calificado con respecto a cualquier pregunta que pueda tener sobre una condición médica u objetivos de salud.

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