Por qué los niños deben evitar las bebidas con azúcar y cafeína
Los padres deben evitar que sus hijos consuman bebidas con azúcar o cafeína a temprana edad, debido a que esto podría perjudicar su desarrollo mental y físico
Las bebidas con azúcar o cafeína pueden generar daños en el organismo. Crédito: Ann in the uk | Shutterstock
La alimentación de los niños es fundamental para su crecimiento, debido a que necesitan consumir nutrientes para el correcto desarrollo y funcionamiento de su organismo. En este mismo sentido, existen algunos ingredientes y productos que deben evitar en sus platillos para cuidarse. Por ello, en esta ocasión les compartiremos por qué los niños deberían evitar las bebidas con azúcar y cafeína.
Uno de las principales características que tienen en común el azúcar y la cafeína es que ambas afectan los niveles de azúcar en sangre, e incluso, algunos estudios afirman que podrían alterar ciertas funciones del cerebro a largo plazo, además de generar ciertos cambios en la conducta de las personas.
En el caso de los niños, muchos expertos alertan sobre el consumo de este tipo de ingredientes en en bebidas, debido a que podría afectar su salud mental y física con el paso del tiempo, sobre todo si existe un exceso de consumo.
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El portal de salud, Kids Health, explicó en su portal que «La cafeína se considera una droga porque estimula el sistema nervioso central. Afecta a los niños y los adultos de forma similar y, en niveles bajos, puede hacer que las personas se sientan con más energía y alerta».
De hecho, resaltaron que el exceso de cafeína puede generar nerviosismo, malestar estomacal, dolores de cabeza, dificultad para concentrarse, dificultad para dormir y tensión arterial elevado, a mediando y largo plazo.
Un claro ejemplo del consumo de cafeína en niños son los refrescos, que suelen contener calorías vacías, por lo que no obtienen las vitaminas y minerales que necesitan. Además, estudios han confirmado que el exceso de refrescos puede hacer que no se obtenga el calcio que los niños necesitan para tener huesos y dientes fuertes.
En este mismo sentido, el refresco es una bebida que también posee altos niveles de azúcar, por lo que pueden promover la aparición de caries, aumento excesivo de peso, diabetes, e incluso, generar enfermedades cardíacas a largo plazo.
Otros ejemplos de bebidas que contienen azúcar y cafeína son las energéticas, utilizadas principalmente para promover el rendimiento de los niños que practican algún deporte.
No obstante, la Dra. Tamara S. Hannon, miembro del Comité de Nutrición de la Academia Estadounidense de Pediatría, explicó que «las bebidas energéticas suelen contener más cafeína que un expreso y mucha azúcar. Consumir estas bebidas puede causar ansiedad, hiperactividad, falta de atención, búsqueda de sensaciones y mala toma de decisiones».
Kids Health también detalló que la cafeína en las bebidas puede tener un efecto diurético, que provoca que el cuerpo elimine agua por medio de la orina y puede contribuir a la deshidratación, causar síntomas de abstinencia y generar adicción.
Por ello, se recomienda que los padres eviten que sus hijos consuman estas bebidas a temprana edad o que se realice con frecuencia, para prevenir que esto afecte su desarrollo.
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