Hablar o permanecer callados durante el acto sexual: experta dice qué es lo más conveniente
Con el aporte de la licenciada Isbelia Farías López, especializada en filosofía y orientación en sexología, te orientamos sobre qué es lo más conveniente en pleno acto sexual con tu pareja: hablar o permanecer callados
¿Con la luz encendida o apagada? ¿Arropados o sin cobija? ¿Con frío o con calor? Estas son algunas de las dudas que las parejas suelen resolver, a medida que se van conociendo y compartiendo gustos en la cama. Sin embargo, hay otra pregunta que no puede faltar: ¿Hablar o permanecer callados? Pues ahora te diremos qué es lo más conveniente.
Una expresión mal utilizada puede ser suficiente para acabar con la «magia» del acto sexual, pero aquello de estar todo el rato sin pronunciar una sola palabra también podría convertirse en aburrido. A menos que el intercambio de gemidos sea lo suficientemente excitante.
La licenciada Isbelia Farías López, especializada en filosofía y orientación en sexología, señala que muchos confunden «hablar» durante el sexo con una ‘dirty talk’ (charla sucia). Esto significa que la comunicación en la cama no necesariamente tiene que ver con palabras obscenas.
Asimismo, aclaró que una persona tiene que saber qué es lo que va a decir en pleno acto físico, porque la adrenalina que produce la excitación puede engañar tu razonamiento. Es decir, podrías decir algo muy fuerte y de lo que luego te arrepientas.
En caso de que te ocurra, te explicamos cómo el humor y los elogios pueden disimular alguna torpeza en la cama.
¿Qué es lo más conveniente: hablar o callarse?
Para la sexóloga, definitivamente lo más beneficioso es saber cómo comunicarse, siempre que haya un equilibrio de las palabras y no interrumpas el placer de tu pareja.
«La voz es una herramienta muy poderosa que ayudar a enfatizar el deseo que se experimenta en el momento», dijo la sexóloga Isbelia Farías López. Frases o preguntas tan sencillas como: «¿Qué quieres hacer ahora?» o «quiero complacerte en lo que te gusta» elevan el erotismo cuando se expresan en el tono adecuado.
«Hablar durante el sexo ayuda a desinhibirse con la pareja y, al mismo tiempo, crear un acercamiento mucho más sensual. Permite pautar el ritmo, pedir y exigir lo que gusta y provocar al otro una y otra vez. En definitiva, aumenta el morbo», concluyó la experta.
Comienza con lo romántico y trasciende poco a poco a lo atrevido
Un «qué bien lo haces» o «me encantan tus manos, tu olor o tu cabello», son un par de frases románticas que pueden expresarse en cualquier momento del acto sexual, ya que tan solo representan un elogio que brinda confianza a tu pareja.
Sin embargo, más adelante y dependiendo de cómo les vaya en la cama, puedes avanzar a algo más atrevido. Ese «me encantan tus manos» puedes convertirlo en algo más específico, como «me encanta que me hagas sexo oral» o «me encanta cuando hacemos esta posición». Date cuenta de que, en ningún momento, has llegado a la ‘dirty talk’.
Y ya cuando te sientas en completa comodidad podrías terminar soltando frases como «qué grande lo tienes», «dame más duro» u otras frases similares donde seguramente incluyas palabras obscenas. Pero ten cuidado con consultarle a tu pareja si alcanzó el orgasmo, porque existen 6 razones para NUNCA caer en esa pregunta.
Lo más importante, sea una charla vainilla o subida de tono, es que las palabras se dediquen a comunicarle a tu pareja lo bien que lo estás pasando o qué pueden hacer en el momento para elevar aún más el placer. Por eso, no pienses en palabras simples como «hablar» o «silencio», enfócate en la «comunicación».