El karma en una relación de pareja: cuando te persiguen las infidelidades y malas experiencias
Cuando fracasamos en una relación de pareja y fuimos responsables de la ruptura de una historia anterior, pensamos y hasta afirmarmos que ahora el karma nos está persiguiendo
El karma se basa en un hostigamiento mental y un remordimiento moral. Crédito: Freepik
Cuando buscamos la definición de “karma” se ubican dos conceptos que, aunque van a lo mismo, provienen de distintos orígenes. Para algunos el karma es un creencia budista que se interpreta como una energía que trabaja en función de los actos humanos, inlcuos llegan a llamarle “espíritu de justicia”. Sin embargo, para otros creyentes del karma se trata de una “ley universal” que señala: lo que aquí se haga, aquí se paga.
Cuando llevamos esto a una relación de pareja seguro pensarás en una infidelidad. “El que engaña en el amor, en el amor será engañado”, “el infiel se convertirá en víctima” y “cuidado con la traición, porque todo se devuelve”, son algunas de las expresiones más conocidas en el mundo del amor. ¿Pero qué tan cierta es esta realidad? ¿De verdad existen las relaciones kármicas?
¡La respuesta es sí! Claro que hay relaciones kármicas, pero no se producen exactamente por el efecto del karma de ese “espíritu de justicia” o “ley universal”. La realidad es que el karma inicia en la mente del que ha traicionado, de quien ha sido infiel, y no solamente va enfocado en el amor, sino también en la familia, el dinero. El karma comienza cuando un ser humano siente CULPA.
Cuando fracasamos en una relación de pareja y fuimos responsables de la ruptura de una historia anterior, pensamos y hasta afirmarmos que ahora el karma nos está persiguiendo. También sucede que al ser víctimas de una traición deseamos que a esa persona le vaya mal, por la cabida que le damos en nuestro corazón a la venganza.
Pero la única verdad que siento en todo esto, con respeto y sin menospreciar a quienes creen en el karma, es que todo se basa en un hostigamiento mental y un remordimiento moral. Una relación de pareja que desafortunadamente fracasa la convertimos en un autocastigo donde aseguramos que hemos pagado el karma.
Y perdón, esto no significa que “hagas y deshagas” porque el karma no existe, no, se trata de que pese a los errores del pasado, provocado o no, tengamos un aprendizaje que brinde segundas oportunidades. Y no necesariamente deben ser con una misma persona, sino en otras relaciones donde podemos reinvicarnos moralmente, dejando atrás el pasado y conscientes de que podemos ser mejores humanos.
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3 tips para evitar que el “karma” arruine tu relación de pareja
Limpia tu energía
1
Hay quienes creen que convivir en energías positivas y de armonía es vital para triunfar en el amor, algo que es respetablemente válido. Cuando limpias tus energías por medio del perdón, soltando el apego y sobre todo con AMOR PROPIO, estamos silenciando cualquier pensamiento que nos haga sentir que vamos a ser perseguidos por el karma.
Perdona y perdónate
2
¡Esto es fundamental! Perdonar es una acción que nos permite soltar: reconres, energías negativas, duelos, soledades, rabias y sinfín de emociones que nos impiden ser feliz. No importa si la otra persona no te ofrece el perdón, porque ya has hecho lo que estaba a tu alcance y ahora lo más importante es perdonarte a ti mismo.
Para encontrar el camino del perdón debemos estar en paz con nosotros. Si entramos en una relación de pareja con dolores del pasado, indudablemente que esos sentimientos invadirán tu nueva historia, y lo más fácil será llamarle “karma”.
Cuidado con la venganza
3
Imagina que estás jugando tenis con tu pareja, cada uno tiene su raqueta: la de infidelidad y tú la de venganza, mientras que la pelota es el dolor.
Cuando alguien te es infiel y tú optas por la venganza, prácticamente estás rebajándote al mismo nivel y allí también podrías caer en la “persecución del karma”.
