Cómo saber si tu hijo es adicto a los videojuegos: 8 señales

La Organización Mundial de la Salud lo cataloga como un trastorno que desvía el desarrollo mental

adicción videojuegos

Foto: Freepik

Con el paso del tiempo los videojuegos se han vuelto más novedosos y atractivos en todas las edades, en especial del sexo masculino. Desde los años 70 inició una popularidad tecnológica que ahora está plagada de actualizaciones

La misma fama y avances tecnológicos ha incidido en que los videojuegos puedan llegar a ser adictivos por su uso desmedido. Sobre todo en el caso de los niños y adolescentes.

La Organización Mundial de la Salud (OMS), a través de un informe, catalogó el uso excesivo de los videojuegos como un trastorno que desvía el desarrollo mental.

No siempre es fácil identificar cuando un hijo está sumergido en una adicción, puesto que lucen como actividades y comportamientos rutinarios. Sin embargo, el portal web Addiction ofrece algunos síntomas para detectarlo.

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Las 8 señales que indican que tu hijo es adicto a los videojuegos:

1) Emociones extrañas

Si empiezas a notar que el niño o adolescente solo se siente tranquilo y feliz cuando está jugando es un signo de adicción. Puede estar furioso, frustrado o triste por determinada situación, pero toma el control remoto y todo se le pasa.

Probablemente esté tratando de drenar sus emociones negativas a través de los videojuegos, lo cual no es recomendable.

2) Frustración por no jugar

Si castigas por una conducta indebida y el castigo supone la suspensión de sus videojuegos, comienza a observar sus reacciones.

Es normal que no esté de acuerdo y proteste, pero si expresa ira y frustración excesiva hay un problema latente.

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Foto: Freepik Crédito: Freepik | Freepik

3) No muestra interés por otra actividad

Si habla todo el tiempo habla de videojuegos, sin mostrar interés por entretenerse de otra manera, la obsesión es clara. Incluso prefiere jugar solo antes que socializar con sus amigos

4) Descuida su aseo personal

La adicción crea en ellos pensamientos inadecuados, como creer que la higiene es una pérdida de tiempo. Lo mismo ocurre con su apetito y alimentación.

5) Dolores de cabeza y fallos en la vista

Por pasar tantas horas frente a la pantalla, tu hijo podría empezar a sufrir de migrañas y de fatiga ocular.

También puede generar otros malestares físicos como mala postura del cuerpo y dolores de espalda. Sin embargo, querrá seguir jugando.

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6) Mal rendimiento académico

Las cosas se complican aún más cuando tu hijo empieza coleccionar malas notas en sus estudios, ya que no dedica el tiempo suficiente. Es un signo claro de adicción y debes atacarlo de inmediato.

7) Se vuelve agresivo

Solo cuando intentas alejarlo de la consola, sino también en otros escenarios donde su reacción es desproporcionada. La adicción a los videojuegos les hace vivir en un mundo donde las agresiones pueden ser normales. Mucho cuidado.

8) No siente interés en compartir con los demás

Cuando solo siente deseo de jugar, comienza a aislarse, dejando de compartir con sus amigos y familiares. En el futuro esto trae inconvenientes emocionales y sociales.

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