Terapia de pareja: cómo funciona y qué puedes esperar de este tratamiento
Dos expertos en psicología y sexología explicaron en qué consiste una terapia de pareja, cómo debe afrontarse para que funcione y qué es lo que realmente puedes esperar del tratamiento
Para que una terapia de pareja sea efectiva, lo primero es que conozcas los 9 motivos que indican que ya es momento de asistir a un consultorio. En líneas generales, este proceso sirve para que tu noviazgo o matrimonio pueda identificar un problema (o varios) existente, que ambos sean conscientes de ellos y adquieran todas las herramientas posibles para solucionarlo y/o superarlo.
El licenciado José Bustamante, secretario general de la Asociación Española de Especialistas en Sexología, afirma que la terapia de pareja puede dar los mejores resultados cuando se acude a tiempo, es decir, justo cuando el problema es detectado y no cuando ya se produce un efecto de desgaste.
«El porcentaje de éxito de una terapia de pareja está en torno al 70%. Sin embargo, es mucho más alto si la pareja acude antes, como mucho, dos años después de que aparezcan los primeros problemas», analizó el experto.
¿Y cómo funciona la terapia de pareja?
Una vez que los motivos estén puestos sobre la mesa y tanto tú como tu pareja estén convencidos de que la terapia es algo que necesitan, es momento de buscar un profesional en el área y darse la oportunidad de lograr un cambio en la relación.
La terapia de pareja puede ser presencial o vía online, siendo la primera algo más efectiva, gracias a la cercanía del profesional, quien puede apreciar miradas, gestos, palabras clave y todo tipo de gesticulaciones en cada sesión. Además, el experto determinará si requiere hacer algunas sesiones individuales.
Es imprescindible que tú y tu pareja reconozcan que necesitaban asistir con un experto, sino también comprometerse con el proceso, que puede durar varias semanas y hasta meses. «Detrás del ruido hay conflictos sin resolver», señala el licenciado Eduardo Torres, psicólogo del Instituto Centta de Madrid y director de la Unidad de Familia.
La creencia de que ambos saldrán de la terapia con una sonrisa de oreja a oreja es algo falsa, porque incluso, en una sesión pueden surgir problemas que ninguna había identificado. Estos procesos no se basan en milagros, sino en trabajo, que comienza en lo personal y se muda a lo relacional.
«En los problemas de pareja los dos son parte del problema y los dos son parte de la solución», apuntó el psicólogo Eduardo Torres. Lo que realmente se espera de una terapia de noviazgo o matrimonio es que ambos miembros de la relación aprendan a resolver sus conflictos, pero sobre todo a gestionarlos.
«Una pareja feliz no es aquella que no tiene problemas, sino la que sabe adaptarse y enfrentarse a ellos», apuntó el experto. De allí una de las diferencias entre las «parejas ideales» y las «parejas que no se rinden».
Al final, una terapia es capaz de determinar si debes y/o decides continuar la relación con esa persona, lo cual es un beneficio para ambos, aunque sea difícil de ver en ese momento. Asimismo, el proceso puede convertirlos en una mejor pareja, más preparada, empática, comprensiva e incluso dispuesta a que otros acudan con un especialista cuando sea necesario.