Cómo hacer un fertilizante casero de plantas con cáscaras de huevo adecuadamente
Optar por fertilizantes caseros es una manera ecológica y consciente de reducir nuestra “basura” al mismo tiempo que nutrimos nuestro jardín
Para hacerlo solo necesitarás las cáscaras de los dos huevos que uses para prepararte el omelet en la mañana, pero que NI SE TE OCURRA triturarlas para ponerla directamente en la tierra a tus plantas. Crédito: Pexels
Ir a la tienda para comprar el fertilizante de tus plantas es una de las opciones para alimentar a tus bebés del reino vegetal, pero no es la única manera de hacerlo. Te explicamos cómo hacer un fertilizante casero de plantas con cáscaras de huevo adecuadamente.
Optar por fertilizantes caseros es una manera ecológica y consciente de reducir nuestra “basura” al mismo tiempo que nutrimos nuestro jardín externo o interno. Además que te lo agradece tu bolsillo porque no cuesta sino el esfuerzo que pones en hacerlo, equivalente a la acción de salir a comprarlo.
Cada persona tiene en sus manos la oportunidad de elegir desarrollar acciones amigables con el medio ambiente e incluso la economía personal.
Nuestras plantas decoran nuestra casa y dan un sentido de hogar, de cuidado y de bienestar. Además, purifican el aire y combaten la energía negativa.
Y como si fuera poco, está comprobado que las actividades y pasatiempos que llevan a la gente al aire libre, como la jardinería, son un soporte para el bienestar de las personas, dice Daisy Fancourt, profesora asociada del University College London.
Entonces, ¿te animas a hacer tu propio fertilizante orgánico casero para las plantas de tu casa?
Para hacerlo solo necesitarás las cáscaras de los dos huevos que uses para prepararte el omelet en la mañana, pero que NI SE TE OCURRA triturarlas para ponerla directamente en la tierra a tus plantas.
El calcio de las cáscaras de huevo no es un calcio soluble por lo que ponerlo así hace que ellas no lo puedan aprovechar.
En cambio, tritura las cáscaras o pásalas por una procesadora. Pásalo a un recipiente de vidrio y échales el jugo de un limón. Notarás como comenzará a hacer efervescencia.
Tápalo y deja reposar por 12 horas. Pasado ese tiempo, dilúyelo en líquido macerado en una botella de dos litros de agua.
Agita bien y riega tus plantas con este líquido fertilizante fortificado con calcio. Es algo que puedes hacer de una a dos veces por mes.
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