No soporto vivir con mi suegra: 7 consejos para mejorar la convivencia

Analiza que tampoco debe ser fácil convivir contigo todos los días, pues también tienes tus métodos, hábitos y quieres tus condiciones. Por tal motivo, practica la empatía hasta donde puedas y comprende lo que tu suegra está sintiendo.

Recuerda que no es lo mismo vivir en casa de tu suegra a que ella se vaya a vivir con ustedes. En el segundo caso, se sentirá con más derechos y tal vez quiera influir en la relación con tu pareja (su hijo).

La rivalidad consiste en «quién cocina mejor», «quién mantiene la casa más ordenada», «quién se despierta más temprano» y hasta «quién prepara mejor el café».

Armar esos retos cuando vives con tu suegra te llevará a frustraciones o falsas victorias. Lo mejor es que acabes con esa rivalidad para no que no haya una «guerra territorial».

La comparación más directa es con los métodos y maneras de pensar de tu mamá, que viene siendo la suegra de tu pareja.

Si estás haciendo comparaciones todo el tiempo sobre «qué o cómo lo hubiera hecho» tu mamá respecto a alguna cosa, es seguro que tu suegra se sentirá ofendida.

Siempre puedes aplicar las técnicas de tu mamá, pero hazlo silenciosamente, es decir, sin la necesidad de anunciar que es un consejo o tip que proviene de ella.

No es lo mismo vivir con tu suegra que aprender a convivir con ella, lo que significa saber cuáles son las expresiones y/o comentarios que pueden molestarte.

A partir de ese análisis, elige bien tus palabras al momento de conversar, hacer un reclamo o pedir algo que necesites.

Y en caso de que no te gusten algunas de sus palabras, hazlo saber de inmediato para crear una empatía.

Esto es sinónimo de prudencia y sabiduría, porque hablar lo necesario puede evitarte un buen problema. Si convives con una suegra que suele ser difícil al conversar o tiene una manera de pensar que no congenia con la tuya, lo mejor es que hables lo necesario.

Y ojo, hablar lo necesario no significa callarte o reprimirte, sino reservarte expresiones o pensamientos.

¡Esto es clave! Es el mejor consejo que podemos darte, porque así se trate de su mamá y tenga una buena relación con ella, es fundamental que mantengas la confianza de pareja.

El día que comience a llevarte la contraria, dándole la razón a tu suegra, allí es donde estarás en un buen lío.

Esta es una de las 8 formas en las que tu suegra puede dañar tu matrimonio y quizás no te das cuenta.

En una convivencia con tu suegra, no siempre tienes que compartir todas tus emociones y tus cosas personales.

Hay comida que puedes mantener guardada, hay objetos de uso personal que necesitas tener en una gaveta cerrada y existen emociones que debes guardarte para no desnudar tu manera de pensar.

Lo mismo sucede con la habitación que compartes con tu pareja. Habrá momentos en los que querrás tener la puerta cerrada y eso está bien. Recuerda que debes fijar límites sanos y necesarios, para que respeten tu privacidad sin que debas exigirlo.