Cómo aumentar tus defensas para la época de invierno a través de la alimentación
Una alimentación rica en vitamina C, D, probióticos y minerales ayudará a mantener nuestro sistema inmune alto
Es probable que con los fríos invernales a finales y principios de cada año, nuestras defensas puedan verse afectadas y la carga viral aumente. Reforzar nuestro sistema inmune debe ser una prioridad en este período estacional. Las gripes o catarros por las bajas temperaturas pueden tumbarnos en la cama y hacernos perder de las fiestas decembrina.
Una de las mejores maneras de prevenir esto, es mantener nuestro sistema inmunológico y defensas altas, así podremos prevenir que los virus y bacterias afecten nuestra salud. Una de las formas más fáciles de hacerlo es a través de la alimentación.
El doctor Josep Lluís Berdonces, director de postgrado en Medicina Naturista de la Universidad de Barcelona, señaló en uno de sus artículos que “las personas que siguen una dieta adecuada tienen menos problemas inmunitarios o infecciosos, y cuando se cambia a una dieta más saludable estos se reducen”.
Así que la vacuna contra la gripe por la época invernal, está en lo que comemos; ya que el sistema inmune necesita una cantidad de minerales y vitaminas para funcionar correctamente y estos los podemos encontrar, en frutas, verduras, pescados, legumbres y lácteos.
En este sentido, la nutrióloga Eliana Reyes del programa de Obesidad y Diabetes de Clínica Universidad de los Andes, destacó que “para que el sistema inmune funcione de forma adecuada, se necesita los nutrientes que se obtienen con una alimentación balanceada, ya que aporta vitaminas, minerales y antioxidantes”.
Incorporar durante todo el año a nuestra alimentación, futas con un alto contenido en vitamina C, puede ayudarnos a prevenir gripes o catarros. La naranjas, mandarinas, limón y berries entre otros, son un gran aliado ya que tienen antioxidantes, lo cual protege las células de nuestro cuerpo de radicales libres y por ende mantiene nuestro sistema inmune en buen funcionamiento.
Los pescados por su parte, poseen un alto contenido en Omega 3, el salmón, atún o sardinas son una fuente importante de ácidos grasos, su aporte a nuestra salud son significativos sobre todo para evitar la deficiencia de vitamina D, durante los meses de invierno
El consumo de legumbre durante todo el año, también fortalece nuestro sistema inmunológico. Los garbanzos, lentejas y porotos tienen un alto contenido de minerales como: potasio, fósforo, magnesio, calcio, hierro y zinc, perfectos para combatir virus.
Para decirle adiós a los virus, hongos y bacterias, el ajo, la cebolla y puerros son la mejor opción. Estas hortalizas funcionan como antibiótico natural, tienen altas propiedades antisépticas, que ayuda a nuestro sistema inmune, existen muchas recetas que incluyen estas verduras para combatir con el resfriado y limpiar los pulmones.
Finalmente los productos lácteos, como el yogurt son una fuente estupenda de probióticos, nos ayuda a mantener la flora intestinal en equilibrio, además contrarresta las infecciones, por ende contribuye para que las defensas de nuestro cuerpo estén altas.
En un artículo publicado por la Universidad de Concepción en Chile, se recomienda no sólo tener una alimentación balanceada a base de minerales y vitaminas, sino también tener una buena higiene de sueño, practicar algún deporte o actividad física, controlar el estrés, el alcohol y tabaco así como disminuir en lo posible los alimentos con alto contenido de azúcar, grasas saturadas y colesterol.
Te puede interesar: