Cómo saber si mi relación ya no funciona: 5 señales que lo dejan claro y lo más sano es terminar
Un grupo de terapeutas y expertos en parejas coincidió en el análisis de 5 señales, las cuales indican que tu relación ya no funciona y definitivamente lo más sensato es que termines esa historia para evitar resentimientos
En una relación que ya no funciona predomina el desdén, la falta de comunicación y de interés por resolver conflictos. Crédito: Shutterstock
Una relación amorosa suele atravesar por momentos de crisis, de hecho, hay 7 alertas que indican que tú y tu pareja están muy mal, pero no significa que la situación sea irreversible. Sin embargo, varios terapeutas coinciden en otros signos que indican que tu relación definitivamente ya no funciona, por lo que la decisión más sana es que cada quien tome su camino.
No necesariamente tiene que haber violencia doméstica para que una relación deba terminarse. Existen otros motivos que dañan severamente el vínculo afectivo, e incluso hay uno que resulta peor que la propia infidelidad. En este sentido, cuando caigas en uno o más de los siguientes escenarios, es probable que lo más sano sea poner fin a la historia.
5 señales de que tu relación ya no funciona y lo más sano es terminar
Pelean todo el tiempo y las discusiones son más intensas
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Las discusiones son necesarias en una relación de pareja, porque producen minicrisis que llevan al crecimiento, desarrollan la tolerancia y ofrecen oportunidades de perdón y reconciliación. Pero esto es muy distinto a las peleas ‘full time’.
La doctora Marley Howard, terapeuta de matrimonio y familia con más de 12 años de experiencia, afirma que las peleas constantes “son una señal de advertencia” que te lleva al fin de la relación.
Asimismo, las discusiones frecuentes evidencian lo tóxica que podría ser tu relación. “Y mientras más intensas sean (estas peleas) menos capaces serán de recuperar el control”, agregó.
Esta situación es lo que se conoce como el fenómeno de la “rueda de hámster” en una relación.
Pierdes interés por resolver los conflictos
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Esta es una secuela emocional causada por los constantes e intensos conflictos con tu pareja. Según la coach Laura Silverstein, terapeuta de parejas desde la localidad de Bryn Mawr, en Pensilvania, la verdadera señal de peligro se produce cuando ya no sientes interés por resolver esas diferencias.
“Si ninguna de las partes está trabajando para tratar de reducir la tensión o reconciliarse después de una pelea, la relación no está en buena forma”, explicó. Este escenario deja, además, otra consecuencia: el resentimiento.
Le ocultas cosas a tu pareja y no te sientes mal por ello
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No necesariamente se trata de ocultar una infidelidad, sino cualquier detalle que no tengas deseo de compartirle. Está comprobado que esconder algunas compras menores a tu pareja sería hasta “positivo” para la relación, pero es un escenario distinto.
En este caso predomina el desdén, la falta de interés por compartir y el querer evitar opiniones o comentarios de tu pareja para no caer en nuevas discusiones.
La coach Nancy Landrum, asesora especializada en habilidades de relaciones transformadoras para parejas y creadora de The Millionaire Marriage Club, señala que esa falta de franqueza y honestidad es un signo de que definitivamente ya no quieres estar con esa persona.
“El derecho a la privacidad es diferente. Ocultarle información a tu cónyuge indica que no confías”, dijo.
Confías más en otras personas
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Y para la cereza del pastel, no solo le ocultas cosas a tu pareja, sino que confías más en otras personas. Pero ojo, esto no te convierte en el “malo de la película”, porque deberías tener tus razones para sentirte así.
“Cuando confías en amigos, compañeros de trabajo o extraños sobre tu insatisfacción en tu relación, en lugar de hablar con tu pareja, es una mala señal”, advirtió el coach Kevin Darné, experto en relaciones de parejas y autor de la obra My cat won’t bark (Mi gato no ladra).
Y aunque no hay intención de cometer una infidelidad, el coach señala que “un oído comprensivo” siempre crea la posibilidad de una aventura emocional. De hecho, el 99% de estas historias comienzan con la confianza entre dos personas, al margen de sus parejas.
Francamente disfrutas estar solo
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Tanto o más que las anteriores, esta señal es definitiva para que tomes la decisión de terminar una relación que ya no funciona.
La doctora Beth Ribarsky, experta en asuntos amorosos y profesora de relaciones interpersonales en la Universidad de Illinois Springfield, explica que no solo disfrutas de estar solo, en casa o en salidas, sino que las llamadas y mensajes de tu pareja comienzan a generarte estrés. “Lo más probable es que empieces a buscar excusas para evitar a tu pareja”, dijo.
Cuando te topas con estas señales, la ruptura amorosa podría ser lo más sensato y convincente. Si continúas en esa relación, en medio de discusiones, desprecios y rechazos, con el tiempo tan solo lograrás que se cree un resentimiento entre ambos.
