Cómo purificar la energía de los cristales con sal del Himalaya
La sal se utiliza en los baños para construir anillos protectores durante las ceremonias espirituales, ya que es naturalmente purificante, lo mismo hace con los cristales: la sal del Himalaya absorbe todas las energías negativas
Existen tres maneras de llevar a cabo este ritual, pero lo más importante es asegurarte de que lo realizarás en el momento adecuado: luna nueva o luna llena. Crédito: Shutterstock
Limpiar energéticamente tus cristales con la sal del Himalaya es totalmente posible, te decimos cómo hacerlo para despojarlos de malas vibras.
Toda gema, cristal o amuleto que se usa, y para el fin que sea, debe ser purificado en función de que se desprendan de las malas energías impregnadas y se restaure la energía a la frecuencia vibratoria que tenían cuando fueron creados en la Tierra.
La técnica es lo de menos, previamente hemos escrito sobre cómo purificar amuletos de protección con palo santo, pero sí resulta oportuno tener alternativas que te permitan elegir la mejor para tu pieza y tu intención.
La sal se utiliza en los baños para construir anillos protectores durante las ceremonias espirituales, ya que es naturalmente purificante.
Y cuando se trata de tus cristales, cuando entran en contacto con la sal del Himalaya absorbe todas las energías negativas que se encuentran dentro de las piedras.
Cuando los purifiques podrás aprovechar todos sus beneficios y las propiedades curativas metafísicas de la piedra sin que la negatividad permanezca alrededor de ti y tus cristales.
Ahora, ¿cómo se purifica la energía de los cristales con sal del Himalaya?
Existen tres maneras de llevar a cabo este ritual, pero lo más importante es asegurarte de que lo realizarás en el momento adecuado: luna nueva o luna llena. La primera se caracteriza por su energía purificadora, que ayuda en la manifestación de la energía; y la segunda es limpiadora y estimulante, que permite liberar energías estancadas.
Entonces, primer método: en un recipiente de vidrio, combina una cucharada de sal rosa del Himalaya con una taza de agua y deja en una ventana para que se cargue con las energías de la luna.
Ten en cuenta que estos cristales que mencionamos a continuación no pueden hacer este método, debido a que se puede dañar en el agua con sal: la angelita, la azurita, la turquesa, la malaquita, el topacio, la piedra de la luna, el ópalo y la selenita.
El segundo método consiste en usar sal seca del Himalaya y enterrar tus cristales por completo en el recipiente de vidrio durante toda una noche.
Además, el tercer método consiste en poner tus cristales cerca de una lámpara de sal del Himalaya durante al menos doce horas, considerando que la bombilla de la lámpara sea lo suficientemente grande para calentar la sal cuando esté encendida.
Recuerda que estas limpiezas energéticas las debes realizar con intención.
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