Qué es normal y qué no en un bebé recién nacido

Especialmente si eres madre primeriza y acabas de vivir un parto, es muy probable que te preguntas si tu bebé tiene un aspecto normal o si deberías preocuparte y llamar al pediatra

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En los recién nacidos, algunos detalles que parecen raros son normales. / Foto: Unsplash

A la mayoría de las madres primerizas les ocurre: cualquier movimiento, señal o detalle que parezca inusual activa las alarmas y hasta genera una carrera al consultorio del pediatra sólo para escuchar “todo está bien”. Saber qué es normal y qué no en un bebé recién nacido puede ahorrarte un par de sustos y algunos cientos de dólares.


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Lo normal

Sin importar lo pequeña que parezca, las madres deben consultar siempre al doctor ante cualquier inquietud, porque nadie conoce mejor al bebé que su mamá, pero quizá podríamos ahorrarnos algunas visitas al consultorio y estar un poco más tranquilas si aprendemos a diferenciar lo que es normal de lo que no es.

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Estos son algunos detalles que, según los expertos, puedes observar en tu bebé y que son perfectamente normales aunque a veces no lo parezcan.

La postura: En general, un bebé recién nacido mantiene los puños cerrados, los hombros encorvados, las rodillas flexionadas y las extremidades cerca del cuerpo, es decir, mantienen la posición fetal.

La respiración: Los bebés recién nacidos respiran de manera un tanto irregular y hasta pueden dejar de respirar por entre 5 y 10 segundos mientras duermen. El hipo y los estornudos también son normales.

La cabeza: Si tu bebé nació por vía vaginal será normal que su cabeza luzca un tanto deformada, algo que no ocurre con los que nacen por cesárea. También es normal que las fontanelas, conocidas a menudo como “molleras”, en la parte superior de la cabeza, sobresalgan cuando el bebé llora.

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Ante cualquier duda, es mejor consultar al médico. / Foto: Unsplash

La mirada: Durante los tres primeros meses es normal que el bebé cruce los ojos o los desvíe, pues no puede enfocar del todo bien. Tal vez tampoco pueda abrir los ojos completamente debido a la hinchazón natural de la cara después de nacer. Las manchas rojas en la parte blanca del ojo también son normales debido al esfuerzo del parto.

La boca: Es posible que el bebé presente algunas manchas blancas en el paladar e incluso quistes de líquido en las encías, pero todo desaparecerá en lsa primeras semanas.

Los senos: Algunos bebés, niñas y niños, pueden tener los senos grandes debido al estrógeno que se transmite al feto durante el embarazo. Esta condición desaparecerá con el paso de los días y no hay que exprimir el tejido.

El ombligo: El cordón umbilical se caerá por sí solo y mientras tanto puede cambiar de color de amarillo a marrón o negro, lo cual es normal.

Los genitales: La vagina de las niñas puede lucir hinchada y algunas pueden tener una pequeña menstruación que es normal debido a la descarga hormonal de la madre. Los niños pueden tener el escroto inflamado, pero esta condición desaparece durante los primeros 6 meses de vida.

La piel: Los sarpullidos, las manchas, la ictericia, son señales normales, pero deben desaparecer en las primeras semanas.


Lo que no es normal

Ante cualquier duda o incertidumbre es necesario consultar la médico, no importa qué tan ingenua pueda parecer una pregunta. Sin embargo, hay algunas circunstancias en que se debe buscar atención médica sin dudarlo:

  • Si el bebé se pone azul o dejar de respirar más de 10 segundos, estás ante una emergencia y debes comunicarte con tu doctor o llevarlo al hospital.
  • Si la zona del ombligo se enrojece, supura líquidos o huele mal, hay que consultar al médico.
  • En el caso de los niños, si una inflamación en el escroto o la ingle no desaparece a los 6 meses de nacido o aparece y desaparece, tal vez requiera un tratamiento quirúrgico.
  • Si la ictericia no disminuye y además se presentan altos niveles de bilirrubina en estudios de laboratorio, se requiere vigilancia médica.

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