Si cumpliste los 30, estos 10 alimentos ya no son buenos para ti

Hay que aceptar que, con el paso de los años, ya nada es igual

alcohol

Para cuando cumples 30, algunas cosas en tu cuerpo cambian. / Foto: Pixabay

A los 20, desvelarte y levantarte temprano la mañana siguiente para ir al gimnasio o salir a un bar con tus amigos un día sí y otro también era algo no sólo usual sino divertido. Pero cuando llegas a los 30 empiezas a pagar la factura: consumir alcohol, comida chatarra, dormir pocas horas, son situaciones que merman tu organismo y se convierten casi en hazañas. De hecho, si cumpliste los 30, hay alimentos que ya no son buenos para ti, ni hablar.

La realidad es que, con los años, el organismo ya no funciona igual y no queda más que aceptarlo. Comenzamos a perder masa muscular y fuerza, el metabolismo se sienta y nos cuesta más trabajo controlar el peso, se empiezan a notar las arrugas en la piel debido a la disminución del colágeno y otras bellezas que no mencionaremos para no deprimirte.

Lo que sí te vamos a decir son los alimentos que, según los expertos, te conviene sacar de tu dieta en esta etapa de tu vida para que tu calidad de vida perdure y te mantengas saludable cuando llegues a los 40 y más allá.


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Alcohol

Sorry, pero así es. El alcohol suele ser un compañero de la juventud de los 20, pero a partir de los 30 representa un exceso de calorías que te costará mucho remontar, además de causar inflamación y deteriorar la piel al restarle elasticidad.

Sopas instantáneas

Son rápidas y fáciles de preparar, sin duda, pero también tienen mucha azúcar y mucho sodio que, a la larga, pueden conducirte a la obesidad y enfermedades crónicas como la diabetes. Evítalas a toda costa.

Galletas y panecillos

Son deliciosos, pero también tienen mucha azúcar y sodio, incluso si son integrales. Si puedes, mejor hornea tus propios panecillos en casa.

Refrescos “light”

Además de contener edulcorantes artificiales para modificar su índice calórico, este tipo de bebidas pueden incluir cafeína, y ambas sustancias cambian la función cerebral. Además, se ha demostrado que quienes beben más de siete vasos de refresco de dieta por semana corren el doble de riesgo de desarrollar enfermedades renales en comparación con quienes lo evitan.

Carne procesada

Tiene alto contenido de sodio y grasa que oxida tus células y te hace envejecer más rápidamente. Salchichas, jamón, y en general los embutidos, están relacionados con el cáncer colorrectal e incrementan el riesgo de enfermedad cardiaca.

Foto: Unsplash

Bebidas con azúcar

Zumos de fruta, tónicos, bebidas en polvo, deportivas y energéticas y, por supuesto, sodas son productos que debes ignorar en el supermercado. Contienen azúcar y edulcorantes como jarabe de maíz, fructosa o sacarosa que no son nada buenos para tu organismo.

Comidas de microondas

Aunque digan que son bajas en calorías, estos productos suelen contener mucho sodio, mucha azúcar y muchos aditivos químicos que no deben ser nada fáciles de procesar para un organismo que ha llegado a los 30.


Barras de cereales

Aunque el marketing las presenta como un producto “light”, en realidad muchas, incluyendo las que ofrecen proteína, contienen grandes cantidades de azúcar añadido que, con los cambios en el metabolismo, se convertirán en reservas de grasa. Mejor prueba un puño de semillas naturales o un batido de verduras o frutas.

Margarina

Las margarinas comerciales suelen ser altas en grasas trans, mismas que incrementan la cantidad del llamado colesterol “malo” en la sangre, y un alto índice de colesterol puede devenir en enfermedades cardiacas. Además, hacen que la piel sea más vulnerable a la radiación solar ultravioleta y, como bien sabes, este tipo de luz acelera el envejecimiento.

Yogurt con sabor

El yogurt es uno de los grandes triunfos del marketing que nos lo ha vendido como un alimento saludable. La realidad es que los yogurts saborizados contienen grandes cantidades de azúcar y otras sustancias que, cuando lees las etiquetas, no sabes ni qué son como almidón modificado y otras más.





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