Creencias limitantes: qué son y cómo perjudican tu autoestima

Los pensamientos y juicios negativos que una persona tiene sobre sí misma, puede generar graves consecuencias, por lo que les compartiremos cómo cambiarlos

Las creencias limitantes deben identificarse para tratarse a tiempo.

Las creencias limitantes deben identificarse para tratarse a tiempo. Crédito: Inside Creative House | Shutterstock

¿Alguna vez te hiciste a creer a ti mismo que no podías hacer algo? Quizá no solo se trate de un pensamiento, sino de un concepto con una raíz más profunda. Este tipo de juicios negativos son reconocidos por profesionales en el área de la salud mental como creencias limitantes, por lo que les compartiremos qué son y cómo pueden afectar el autoestima.

La forma en que una persona piensa influye directamente en su desarrollo, debido a que esto se ve reflejado en las acciones que hace y aquellas en las que se limita por miedo, frustración o dudar de sí mismo, siendo este último rasgo, un aspecto que podría resultar negativo a largo plazo.

También leer:


¿Qué son las creencias limitantes?

Sinergias Psicología, un grupo de psicólogos profesionales, explica que «las creencias limitantes son esos pensamientos construidos a través de la experiencia, que hacen interpretar la realidad de una manera que limita tu desarrollo potencial, e impide que alcances aquello que deseas. Una creencia limitante es algo que se manifiesta en el estado de ánimo o algo que crees de ti mismo/a que, de algún modo, te condiciona».

Por lo general, este tipo de pensamientos o juicios propios resultan ser negativos, debido a que inician con «no puedo…», «no soy…», «me falta…», «soy incapaz de…» o «no se me da bien…», y aunque no sean ciertas, muchas personas terminan creyéndoselo.

Las creencias limitantes pueden perjudicar la vida de una persona.
Las creencias limitantes pueden perjudicar la vida de una persona.
Crédito: Chinnapong | Shutterstock

El portal de psicólogos explica que existen tres tipos de creencias limitantes, entre las que se encuentran: de capacidad, posibilidad o merecimiento.

«Estas creencias pueden influir considerablemente en nuestra manera de regularnos emocionalmente. Pensar de una manera inadecuada sobre nuestros sentimientos puede facilitar que no los tengamos en cuenta como se merecen, que los invalidemos y dificultar una gestión eficaz», agrega.

Si estas creencias limitantes no se identifican a tiempo o se tratan, pueden generar consecuencias notables como el auto-sabotaje, baja autoestima, miedo o ansiedad, provocando la pérdida de oportunidades, el impedimento del crecimiento personal y profesional, estancamiento en el trabajo y una visión negativa de uno mismo y del mundo.

¿Cómo cambiar las creencias limitantes?

El primer paso para evitar que estos pensamientos te afecten es a través del cambio sobre la percepción propia, desafiando limitaciones que quizá estuviste ignorando pero te estuvieron afectando indirectamente.

Para cambiar las creencias limitante, primero debes identificarlas. Empezar a escuchar tus pensamientos negativos y analizar de dónde crees que vienen, si de algún comentario que escuchaste en el pasado de otra persona o algo que simplemente surgió en ti.

Busca un lugar tranquilo, relájate y transforma ese pensamiento. Dale la vuelta a la creencia limitante y crea una creencia potenciadora, que contradiga aquello que te causaba miedo, ansiedad o frustración.

Puedes escribir este nuevo pensamiento en una libreta y empieza a repetírtelo diariamente, sobre todo cuando vuelva a aparecer esta creencia limitante. Todo se trata de identificar y mejorar la percepción sobre ti mismo.

¿Listo para deshacerte de las creencias limitantes?

Sigue leyendo:

En esta nota

salud mental
Contenido Patrocinado