Mascarilla de romero y manzanilla para embellecer tu rostro
Gracias a los efectos combinados del romero y la manzanilla, te ofrecemos los ingredientes y el método para aplicarte una mascarilla natural en el rostro
Al tratarse de ingredientes naturales, seguro que el romero y la manzanilla serán bien recibidos por tu piel. Crédito: Pat_Hastings | Shutterstock
Aunque se trata de dos ingredientes naturales comunes, muchos desconocen el potencial de combinar romero y manzanilla para embellecer la piel del rostro. Ambos remedios tienen propiedades antiinflamatorias y antioxidantes, pero también sus bondades individuales.
La manzanilla alivia la piel y la suaviza, reduciendo posibles irritaciones y manchas rojas. Asimismo, el romero estimula la circulación y arroja un efecto tonificante que aclara la piel y le brinda elasticidad. Cuando los combinas, literalmente tu piel se revitaliza.
Si tienes piel sensible o propensa al acné, de carácter hereditario, estrés o mala alimentación, la mascarilla de romero y manzanilla puede transformar tu rutina para el cuidado de la piel. Te mostramos cómo prepararla:
Así debes preparar tu mascarilla de romero y manzanilla para el rostro
Vas a necesitar: una cucharada de flores secas de manzanilla, una cucharada de hojas secas de romero, agua caliente (suficiente para formar la pasta) y miel. Aunque el último ingrediente es opcional, es recomendable por sus propiedades hidratantes.
Prepara la mascarilla de romero y manzanilla:
Muele las flores de manzanilla y las hojas de romero hasta convertirlas en polvo. Seguidamente, mételas en un recipiente y agrega el agua caliente, poco a poco hasta obtener una pasta consistente que deber de color verde.
Opcionalmente, añade la cucharada de miel para obtener un efecto extra hidratante.
Una vez que se enfríe la mezcla (por el agua caliente), aplícala sobre tu rostro limpio, dejando actuar durante unos 15 o 20 minutos.
Pasado el tiempo, enjuágate la cara con agua tibia para retirar la mascarilla y sécate con una toalla, dándote suaves golpecitos.
Aunque no es necesario aplicarla todos los días, la recomendación es que la incorpores a tu rutina del cuidado de la piel, pudiendo ser unas tres o cuatro veces por semana.
Al tratarse de ingredientes naturales, seguro que será bien recibido por tu piel, pero ante cualquier reacción adversa, suspende la aplicación y consulta con un médico.
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La información contenida en este artículo es solo para fines educativos e informativos y no pretende ser un consejo médico o de salud. Siempre consulte a un médico u otro proveedor de salud calificado con respecto a cualquier pregunta que pueda tener sobre una condición médica u objetivos de salud.
