Recomendaciones para brindar apoyo emocional después de un evento traumático
Diversas organizaciones estuvieron presentes en la zona para asistir y entregar contención emocional a las familias afectadas
La pérdida de un familiar o ser querido, la ruptura de una relación, el diagnóstico de una enfermedad compleja o terminal, la depresión o bipolaridad, son eventos traumáticos en los que se necesita apoyo emocional.
Para muchas personas, tener este apoyo emocional pasa desapercibido, pero cuando se recibe de la manera correcta, los efectos positivos son de beneficio para todos.
El psicólogo Marcel Boerner, subgerente de Desarrollo y Experiencias de Aprendizaje de la gerencia de Cuidado y Desarrollo de IST, recomendó algunas actitudes para enfrentar los momentos complejos de la vida.
¿Qué ocurre con una persona luego de vivir un suceso traumático?
El profesional explicó que cuando una persona atraviesa por una situación traumática, lo habitual es que manifieste un alto malestar emocional.
“Distintas emociones percibidas de manera desagradable como estrés, pena, rabia, enojo, frustración”, las cuales pueden variar dependiendo del individuo.
También, “es usual que se generen otras sintomatologías como insomnio, dificultades para dormir, pesadillas, desconcentración, fallas en la memoria, flashbacks de la escena”, acotó el experto.
En estos casos, es esperable que los síntomas remitan espontáneamente al cabo de 1 a 3 meses, sin mediar tratamiento necesariamente.
“Se trata de una reacción normal y adaptativa, de alguna manera, a la situación altamente traumática de las personas”, afirmó el psicólogo de IST.
No obstante, el problema continúa cuando algunas personas pueden mantener esa sintomatología por más tiempo.
“Es allí cuando debemos pensar que el paciente puede desarrollar un cuadro clínico como un trastorno ansioso-depresivo o por estrés postraumático a largo plazo”, detalló Boerner.
¿Qué podría considerarse como primer auxilio psicológico?
A grandes rasgos, los “primeros auxilios psicológicos” son una intervención orientada a disminuir el malestar emocional y prevenir secuelas a largo plazo.
En esta intervención, “se escucha activamente a la persona, se le acoge y comprende, se le normaliza con lo que le está diciendo, se le trata de bajar la ansiedad, eso es una fase de psicoeducación”, detalló el experto en salud mental.
Además, agregó que se tiene que “evaluar si la persona requiere un tratamiento, una intervención más profunda, por ejemplo, con fármacos”.
En estos casos es relevante activar los primeros auxilios psicológicos para poder identificar cuáles son las redes de apoyo del paciente.
El especialista de IST aseguró que los auxilios psicológicos no necesariamente deben aplicarse solo por profesionales de la salud mental, sino que también puede hacerlo cualquier persona con un entrenamiento adecuado.
Por otra parte, una de las recomendaciones clave que entregó el psicólogo Marcel Boerner es “no aislarse, conectarse con sus redes de apoyo, comunicar lo que le está pasando y poder expresar las emociones que siente”.
Además, es aconsejable complementar dichos ejercicios con una alimentación balanceada, actividad física y evitar el consumo de drogas o alcohol, ya que puedan empeorar otros aspectos de la salud mental.
¿Cuándo se debe acudir o pedir ayuda a un profesional?
Lo ideal es acudir a un especialista lo antes posible cuando hay eventos traumáticos, así lo detalla el especialista para Bio Bio Chile.
En los casos en que las personas tienen antecedentes de problemas importantes de salud mental, como por ejemplo una depresión o ideas suicidas.
Para ellos, es necesario retomar sus tratamientos habituales o contar con una atención médica que corresponda con su respectivo cuadro.