Orgasmo extraño: 5 situaciones curiosas que pueden pasarte en pleno éxtasis

Parece contradictorio, porque un estallido de placer debería ofrecer un efecto calmante ante cualquier dolor de cabeza. Sin embargo, la Mayo Clinic explica que las «jaquecas post-orgasmo» sí pueden ocurrir, siendo más frecuente en los hombres y las personas que padecen de migrañas.

El grupo de expertos también aclara que este tipo de dolores de cabeza, por lo general, tan solo duran unos minutos.

Por su parte, la doctora Laurie Mintz, terapeuta y profesora de psicología de la sexualidad en la Universidad de Florida, explica que «se trata de un leve dolor de cabeza que se va incrementando a medida que tu cuerpo se excita», sintiéndose más durante el orgasmo, o incluso antes.

Aunque todavía se desconoce la razón exacta de estos dolores de cabeza, algunos expertos lo asocian al pico de adrenalina al que llega tu cuerpo.

En pleno orgasmo, un ataque de risa o llanto luce bastante extraño, al punto de que tu pareja pudiera quedar «horrorizada». Pero la verdad es que son respuestas emocionales normales, producto del descargo hormonal y otras razones que aquí te explicamos.

Así que si lloras o ríes durante tu momento de máximo placer, no te preocupes, que no es un signo de locura.

La tensión en los músculos de las piernas y de la zona vaginal, que además es una de las señales físicas para saber si realmente estás teniendo un orgasmo, es una respuesta fisiológica común.

Lo extraño comienza cuando esa tembladera parece no tener fin, siendo una situación algo incómodo por la presencia de calambres y contracciones musculares. Los expertos recomiendan tomar agua o comer alimentos con potasio, lo cual calma el éxtasis del cuerpo.

¡De lo más extraño! Imagina que en pleno orgasmo comiences a estornudar como si hubieses inhalado un polvo de pimienta. Aunque suena bochornoso, la respuesta estaría en un «cruce de cables» que ocurre en tu sistema nervioso, siendo el estornudo un acto reflejo, tal como la excitación sexual.

Algunos expertos indican que se trataría de una «confusión» que sufre tu cerebro en un orgasmo, activando funciones automáticas. Sin embargo, esto no está confirmado científicamente.

A menos que hayas tenido relaciones sexuales con el cabello mojado y cerca de la ventana, recibiendo vientos fríos, la idea de desarrollar una gripe en pleno orgasmo luce absurda.

Pero seguramente no sabías que existe un trastorno llamado: Síndrome de la Enfermedad Post-Orgásmica (POIS). Según estudios, es una situación que afecta a los hombres en mayor medida, experimentando síntomas como fiebre, fatiga y hasta congestión nasal después de su eyaculación.

Hasta el momento, este trastorno continúa bajo investigación, pero tendría que ver con la autoinmunidad de tu cuerpo y cómo se desactiva durante el orgasmo.