Yoga y sexualidad: cómo aplicar ciertas posturas ayuda a mejorar tu experiencia y desempeño en la cama
Las asanas o posiciones no son diferentes para mezclar el yoga y la sexualidad
El yoga es una práctica que guarda múltiples beneficios para el cuerpo y la mente. De hecho, ciertas posturas pueden ayudar a mejorar tu experiencia y desempeño en la cama con tu pareja.
Las enseñanzas, las técnicas y la práctica del yoga implica movimientos conscientes, respiración y relajación y pueden ayudar a las personas a lograr relaciones sexuales más conscientes e intensas.
Las asanas o posiciones no son diferentes para mezclar el yoga y la sexualidad. Consiste en el uso de posturas tradicionales mientras el otro estimula o penetra a su pareja.
Su práctica puede mejorar la salud física y mental, así como aspectos de la función sexual y facilitar que una persona alcance el placer sexual.
Si deseas conjugar estas prácticas con la intención de mejorar tu vida sexual, algunas posiciones sexuales de yoga que las personas pueden probar incluyen:
Pose del arado
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La pose del arado es una de las asanas de semi-inversión más utilizadas en las sesiones de esta disciplina, debido a que es apta para todos los niveles, ayuda a mejorar la circulación sanguínea y a liberar la carga de la zona lumbar.
Su naturaleza puede ayudar a facilitar una penetración más profunda.
Como pareja deben considerar que realizar esta asana puede no ser adecuada para todos. Puede no ser aconsejable para personas con presión arterial alta , lesiones en el cuello y la columna vertebral, y aquellas que están embarazadas.
Perro boca abajo
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El perro boca abajo es una postura en la que estiras toda la cadena posterior de nuestro cuerpo, particularmente en la espalda, los hombros, los glúteos, los isquiotibiales y los gemelos.
Formando una V invertida desde los cuatro puntos de apoyo, esta posición logra abrir las caderas, lo que puede mejorar el flujo de sangre a la región pélvica y ayudar a aumentar la lubricación y la probabilidad de orgasmos.
Esta postura facilita el acceso al punto G tanto del hombre como de la mujer.
El bebé feliz
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Esta es una pose suave y relajante ideal para aumentar la relajación y estirar el cuerpo. Implica acostarse boca arriba y girar de un lado a otro agarrando la planta de los pies.
Se abren las caderas y la espalda baja y se estiran los glúteos, por lo que es una posición ideal para la penetración anal o vaginal.
La pareja que realiza la postura también puede envolver sus piernas alrededor de su pareja para mayor intimidad y comodidad.
La cobra
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La posición de la cobra abre la zona lumbar, lo que la convierte en una opción para la penetración desde detrás. También brinda un acceso más profundo a la pared vaginal y al punto G.
Estira y fortalece los músculos de la espalda y el pecho, lo que la hace útil para las personas con dolor de espalda.
Consideren como pareja que esta posición de yoga no debe practicarse si se padece de lordosis, hernia, úlcera, hipertiroidismo o problemas en la espalda baja o el hígado.
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