Razones de por qué el sexo oral influye en el cáncer de garganta
En España, el cáncer orofaríngeo se encuentra entre los diez más diagnosticados, con unos 8 000 nuevos casos anuales
Los factores que pueden aumentar el riesgo de cáncer de garganta incluyen los siguientes: Consumo de tabaco, que incluye cigarrillos y tabaco de mascar.
Consumo excesivo de alcohol. Infecciones virales, incluido el virus del papiloma humano y el virus de Epstein Barr.
En las dos últimas décadas se ha producido un rápido aumento del cáncer de garganta en Occidente, hasta el punto de que algunos lo han calificado de epidemia.
El cáncer de garganta se produce cuando las células de la garganta desarrollan mutaciones genéticas.
Estas hacen que las células crezcan sin control y continúen viviendo después de que las células sanas mueran normalmente. La acumulación de células puede formar un tumor en la garganta.
No se sabe con exactitud la causa de la mutación que provoca cáncer de garganta. Sin embargo, los médicos han identificado factores que pueden aumentar el riesgo.
¿Cuáles son los síntomas del cáncer orofaríngeo?
Los síntomas del cáncer orofaríngeo pueden incluir dolor de garganta persistente, dolores de oído, ronquera, inflamación de los ganglios linfáticos, dolor al tragar y pérdida de peso sin causa aparente.
Algunas personas no presentan ningún síntoma. Si tiene algún síntoma que le preocupa, asegúrese de consultar a su médico de inmediato.
El 80 % de los adultos practica sexo oral
Los estudios sobre tendencias conductuales muestran que el sexo oral está muy extendido en algunos países.
En un estudio realizado a cerca de un millar de personas, sometidas a amigdalectomía por motivos no oncológicos en el Reino Unido, el 80 % de los adultos declaró haber practicado sexo oral en algún momento de su vida.
No obstante, afortunadamente, sólo un pequeño número de esas personas desarrolla cáncer de orofaringe.
Aunque aún no está del todo claro de qué depende, la teoría predominante es que la mayoría de las personas contraen infecciones por VPH y somos capaces de eliminarlas por completo.
Sin embargo, un pequeño número de personas no son capaces de deshacerse de la infección, quizás debido a un defecto en un aspecto particular de su sistema inmunológico.
En esos pacientes, el virus es capaz de replicarse continuamente y, con el tiempo, se integra en posiciones aleatorias en el ADN del huésped, algunas de las cuales pueden hacer que las células del huésped se vuelvan cancerígenas.
Vacuna contra el cáncer de garganta
Según Hisham Mehanna, profesor del Instituto de Cáncer y Ciencias Genómicas, Universidad de Brimingham, Reino Unido, la vacunación de los jóvenes contra el VPH se ha implantado en muchos países.
«Ahora hay cada vez más pruebas, aunque todavía pruebas indirectas, de que también puede ser eficaz para prevenir la infección por VPH en la boca», asegura a la BBC.
También existen pruebas que sugieren que los niños están protegidos por la «inmunidad de grupo» en países en los que la cobertura de la vacuna en las niñas es alta (más del 85 %).
Habría que esperar que en unas décadas el incremento de la protección conduzca a la reducción del cáncer de orofaringe.
Eso está muy bien desde el punto de vista de la salud pública, pero sólo si la cobertura entre las niñas es alta, superior al 85 %, y sólo si uno permanece dentro del «rebaño» protegido.
Sin embargo, no garantiza la protección a nivel individual -y especialmente en esta época de viajes internacionales- si, por ejemplo, alguien mantiene relaciones sexuales con personas de países con baja cobertura.
Y desde luego, la vacuna no ofrece protección en países donde la cobertura de vacunación de las niñas es baja, por ejemplo, EE.UU., donde solo el 54,3 % de las adolescentes de 13 a 15 años habían recibido dos o tres dosis de vacunación contra el VPH en 2020.