Hacks para estar mejor: Trucos para ensuciar menos cuando cocinas

Lo primero que debes hacer es considerar las cosas que que requieres indispensablemente para elaborar tu platillo, tanto en ingredientes como en utensilios

Cuáles son los objetos de tu casa que deberías limpiar todos los días.

El fregadero de la cocina acumula una cantidad inimaginable de bacterias, pero limpiarlo tan solo te tomará unos 10 minutos. Crédito: Shutterstock

Cocinar en casa es uno de los placeres más lindos para quienes amamos servir a otros, especialmente a seres queridos, pero también representa un trabajo importante limpiar lo que se ensucia.

Si te gusta cocinar, seguro piensas en el desorden y el tiempo que también lleva dejar todo en orden de nuevo, pero si aún insistes en generar ese gesto de amor a otros, acá te dejamos algunas recomendaciones:

Lo primero es hacer una lista mental de las cosas indispensables para cocinar ese plato.


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Es importante tener en cuenta los ingredientes y los utensilios, así como los recipientes y otros aparatos que puedas necesitar.

Y para evitar dejar sobre la cocina manchas difíciles de remover, o salpicaduras de aceite, te invitamos a probar el papel aluminio sobre la superficie, de este modo, puedes quitarlo y lo desecharlo al terminar de cocinar.

Este paso de seguro te ahorrará tiempo de limpieza y gasto en productos de higiene en limpieza de cocina. Además, si tienes la cocina despejada evitarás situaciones en que los platos terminen rotos.

También te puede ayudar, organizar y limpiar los ingredientes en recipientes previo a la cocción, esto evitará ir cortando o preparando hasta el momento en que los necesites.

Utiliza un recipiente grande para colocar adentro todas las cáscaras, y si tienes un compost, puedes aprovecharlo como recurso para ese proyector.

Además, así aprovechas el tiempo mientras esperas la cocción para limpiar un poco.

Para organizar los utensilios, puedes usar otro recipiente con un poco de agua y detergente, a modo que puedas dejar en remojo y cuando vayas a lavar ya estén más fáciles de remover el sucio.

Es un poco diferente cocinar con un plan tan armado, pero si lograr hacerte el hábito, será mucho más fácil limpiar y mantener el orden.

Normas de higiene para cuidar tu cocina

Una de las normas universales, no solo en la cocina, es lavarse las manos correctamente. Esto hace que las bacterias se propaguen menos tanto en las superficies como en los alimentos.

También puedes evitar utilizar anillos cuando estés cocinando, ya que impiden lavarse las manos correctamente y son propensos a acumular bacterias y sucio. 

Lo más recomendable es mantener las uñas cortas y no usar esmalte de uñas cuando se cocina. 

Y si te haces un corte en las manos, límpiala inmediatamente y colócate un apósito para evitar que la sangre caiga en la preparación. 

Tira la basura para una correcta higiene en la cocina

Es importante cambiar regularmente las bolsas donde se acumula la basura. La comida en mal estado se descompone rápido y empiezan a formar bacterias.

No propagues la grasa

Limpiar la mancha de grasa casi siempre termina por una transferencia de sucio, de la superficie al paño, Entonces, lo ideal es utilizar un papel de cocina absorbente para detener la propagación de grasa y bacterias por todas las superficies.

Limpia siempre la nevera

Ten en cuenta los alimentos que estén en descomposición: sácalos. También evita los derrames y la comida en envases que puedan contaminar todo lo demás, utiliza papel de cocina para limpiar a diario los espacios dentro de la heladera y evita que acumule malos olores.

Cuidado de los alimentos

Evita la intoxicación por consumo de alimentos, especialmente por contaminación cruzada. Por ejemplo, utiliza tablas diferentes para cortar el pescado, la carne, las verduras, los productos lácteos o el pan (las tablas de diferentes colores pueden facilitarlo). 

También puedes utilizar utensilios diferentes para los alimentos crudos y cocinados. Otro gran truco dentro de la cocina es nunca dejar alimentos comestibles junto a la carne cruda, ni siquiera cuando se guardan en la nevera. 

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