Hipertensión: cuándo debo acudir al médico si tengo presión arterial alta

La enfermera Rachael Zimlich, especializada en cuidados intensivos desde Cleveland y redactora médica, explicó los números sobre tu presión arterial que puede arrojar un tensiómetro y cuándo es necesario que recibas atención médica de emergencia

Qué es una crisis hipertensiva y cuándo debes acudir al médico.

El tensiómetro indica tu presión diastólica y sistólica, y dependiendo de lo altas que sean las cifras, sabrás si padeces una crisis hipertensiva. Crédito: Shutterstock

La presión arterial alta, indudablemente, es una emergencia médica, sin embargo, no siempre requiere atención urgente. También depende del historial clínico del paciente, incluyendo si padece de hipertensión o no, o la condición actual, como un embarazo.

La enfermera Rachael Zimlich, especializada en cuidados intensivos desde Cleveland y redactora médica, precisa que una presión arterial de 180/120 milímetros de mercurio (mmHg) o superior ya es motivo suficiente para asistir a un hospital y recibir atención médica de urgencia. Esto es lo que se conoce como crisis hipertensiva.

Generalmente, va acompañada de síntomas como dolor en el pecho o la espalda, dificultad respiratoria, visión borrosa y cambios o dificultad en el habla.

Por el contrario, si no experimentas síntomas, es menos probable que requieras atención urgente. Sin embargo, debes tomar medidas para controlar los resultados que arroja el tensiómetro y, de ser posible, pedir ayuda a personas cercanas.

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Cómo leer un tensiómetro

Lo primero es que aprendas a leer un tensiómetro, sea manual o digital. La presión arterial se compone de dos números: la presión sistólica y la diastólica, que llevan el nombre de los dos movimientos del corazón.

Según los Institutos Nacionales de Salud de Estados Unidos (NIH), “la presión sistólica es la presión cuando los ventrículos bombean sangre fuera del corazón. Es el número más alto en el tensiómetro. Y la presión diastólica es la presión entre latidos cuando el corazón se está llenando de sangre”.

La presión arterial puede aumentar por una situación emocional, como un fuerte momento de estrés, cuando ocurre un derrame cerebral o por la ingesta de algún medicamento contraindicado.

Si eres hipertenso y consumes medicinas para controlar la presión arterial, es casi seguro que se elevará si dejas de tomar el medicamento recetado por un cardiólogo especializado.

Urgencia hipertensiva vs emergencia hipertensiva

Para saber cuándo acudir al médico, tienes que fijarte en dos factores: lo que arroja el tensiómetro y los síntomas que sientes. Allí podrás determinar si tienes una urgencia hipertensiva o una emergencia hipertensiva, explica la enfermera Rachael Zimlich.

La urgencia hipertensiva indica una presión arterial de 180/120 o superior, pero sin síntomas. Aunque tal vez no es indispensable que acudas a un hospital, estás en todo tu derecho de hacerlo si así te sientes mayor tranquilidad.

Por su parte, la emergencia hipertensiva arroja una presión arterial de 180/120 o superior, pero acompañada de síntomas que, evidentemente, te hacen sentir decaído, alterado y superado.

En caso de que experimentes el primer caso (la urgencia), tu proveedor de atención médica debe evaluar por qué ha sucedido, los acontecimientos previos a ese cuadro de hipertensión y seguramente una revisión y control de los medicamentos.

En el segundo escenario, sobre todo cuando no hay antecedentes de hipertensión, lo correcto es que tú mismo u otra persona llame de inmediato al 911. Si cuentas con vehículo, dirígete rápidamente a un departamento de emergencias o pide a un vecino que te lleve.

Cuando una crisis hipertensiva no se atiende, tienes riesgo de sufrir un ataque cardiaco, un accidente cerebrovascular (ACV) u otra afección que pone tu vida en peligro.


La información contenida en este artículo es solo para fines educativos e informativos y no pretende ser un consejo médico o de salud. Siempre consulte a un médico u otro proveedor de salud calificado con respecto a cualquier pregunta que pueda tener sobre una condición médica u objetivos de salud.

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