5 banderas rojas en tu relación de pareja y todas provienen de ti
Con el aporte de expertos en asuntos amorosos, te contamos cuáles son las banderas rojas que provienen de ti y que ponen en peligro tu relación
Las banderas rojas están a la orden del día en muchas relaciones: celos, narcisismo, ley del hielo, prohibiciones, falta de comunicación y/o sexualidad insatisfactoria. Detectarlas es fundamental para saber si debes trabajar en ellas con tu pareja o son muy contundentes y lo mejor es poner fin a la historia.
¿Pero te has puesto a pensar en aquellas banderas rojas que provienen de ti? No significa que excluyen a tu pareja, porque cada problema debe ser de ambos, pero hay señales de alerta que podrías estar experimentando sin darte cuenta, y necesitas hacer el autoanálisis de inmediato.
Con el aporte de psicoterapeutas y expertos en parejas, te contamos cuáles son las más frecuentes.
5 banderas rojas que provienen de ti en una relación de pareja
Sientes confusión sobre tu relación
1
Si llegas a un punto en el que dejas de sentir plenitud al lado de tu pareja y te confunde lo que realmente sientes o deseas, debes prestar mucha atención al escenario, recomienda la coach Evie Shafner, terapista de relaciones desde Los Angeles.
La experta señala que si tienes muchas señales contradictorias sobre cuánto te importa tu pareja o cuánto tiempo quieres estar a su lado, no debes ignorar eso, porque es una clara bandera roja.
Evie Shafner insiste en que en una relación debe haber sentido de reciprocidad, por lo que ambos deberían entregarse por igual. De lo contrario, las cosas no van a funcionar.
Nunca discutes
2
El hecho de que jamás discutas con tu pareja no es algo sano, aunque te suene contradictorio, porque estás tocando un extremo.
Nicole Rainey, consejera de salud mental y fundadora de Mosaic Creative Counseling, advierte que, a su ojo profesional, «una relación no es tan fuerte como podría pensarse cuando nunca hay discusiones».
En realidad podrías estar evitando los conflictos y esto no es saludable. Además, el problema es que cualquier cosa puede estallar en una gran discusión con muchos sentimientos reprimidos.
Asimismo, un escenario fatal es que no discutas porque te da igual el conflicto con tu pareja. Allí es donde realmente está la bandera roja.
Te sientes mejor estando con otras personas
3
Si prefieres estar con amigos o conocidos, en lugar de tu pareja, estás ondeando una enorme bandera roja.
Allison Raskin, escritora, comediante y defensora de salud mental, explica: «Si sientes que tienes que caminar sobre cáscaras de huevo, eso puede ser una señal de que no son un espacio seguro el uno para el otro».
La falta de conexión íntima, que no es el sexo, sino la conversación profunda e interesante, puede llevarte al fracaso de la relación.
Simplemente, asumes sobre lo que tu pareja haría o no
4
Por mucho que conozcas a la persona que camina de tu mano, nunca sabrás a plenitud de lo que es capaz de hacer o no, y asumirlo es un gran error.
«Si una persona cree que su pareja ‘nunca’ haría o pensaría esto o aquello, significa que podrías tener una idea de su pareja en lugar de verlo como una persona completa y compleja«, así lo expresa Alli Spotts-De Lazzer, terapeuta familiar y matrimonial.
La profesional agrega que este tipo de pensamientos podrían provocar que pases por alto señales «tanto sutiles como evidentes debido a su propia forma de pensar».
No tienes contacto visual con tu pareja
5
Aunque parezca un detalle muy sencillo y casi ni se nota, el hecho de no mirar a los ojos a tu pareja durante un tiempo prolongado es una clara bandera roja.
Así lo explica David Helfand, psicólogo y propietario de Life Wise. «Como regla general, los humanos establecen contacto visual con personas a las que sienten más cercanas o por las que se sienten atraídos», destacó.
En este sentido, si notas que tu pareja evita el contacto visual, podría significar que algo está sucediendo debajo de la superficie que debe abordarse.
Mirarse a los ojos, en cualquier escenario de una relación, es una manera poderosa de reforzar el vínculo entre ambos, y no hacerlo produce todo lo contrario.
Buscar las banderas rojas en las relaciones sentimentales se ha puesto de modo, para así huir cuando sea necesario. Sin embargo, el autoanálisis es fundamental, porque solo así sabrás si el principal problema estás siendo tú.