Mi gato no me deja dormir en la madrugada: 5 tips para evitar este problema
El aburrimiento, el hambre o la sed, su necesidad de explorar y sobre todo la acumulación de energía son algunos motivos por los que tu gato no te deja dormir
Haciendo rasguños a la puerta, con sus distintos tipos de maullidos o tal vez saltando inesperadamente en la cama… lo cierto es que tu gato no te deja de dormir en la madrugada y la situación ya comienza a enloquecerte. Hay quienes prácticamente se resignan a la situación, asegurando que es normal en los felinos, pero la realidad es que sí puedes moldear sus hábitos nocturnos.
Lo primero que debes comprender es su naturaleza. De acuerdo a Advance Affinity, sitio especializado en cuidado de gatos, estos animalitos son depredadores y el 50% de su tiempo diario lo dedican a dormir para reponer sus energías cazadoras. Esto también se relaciona con brincar, correr y jugar.
En este sentido, una de las razones por las que tu gato permanece despierto durante la madrugada es que aún acumula energías que no ha saciado, por lo que busca atención, comida y juegos.
Si tu mascota se aburre de descansar te buscará inmediatamente para interactuar. Lo mismo hará si siente hambre o sed y no tiene acceso a su alimentos y agua. También lo hacen por su necesidad natural de explorar en algunas zonas de la casa, e incluso por simple costumbre, ya sea porque se lo permitas o porquese ha adecuado a ese hábito, que para ti resulta un malhábito.
Cabe aclarar que estos motivos están asociados a su comportamiento y necesidad. Cuando tu gato está enfermo o en celo, sus conductas noturnas están más justificadas.
Qué hago para que mi gato me deje dormir en la madrugada: 5 tips
No le castigues, en primer lugar
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Tu gato no está haciendo nada malo por estar despierto en la madrugada, simplemente no tiene sueño y está activo. Castigarlo porque llama tu atención es una respuesta a tu frustración al despertarte en medio de la madrugada, así que no lo hagas.
Además, encerrarlo, gritarle o pegarle, lo cual rechazamos absolutamente, solo podría originar miedo y frustración en tu mascota, lo que origina más conductas complicadas.
Mantenlo estimulado durante el día
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Y si lo haces en la noche, mejor, porque estará cansado durante toda la madrugada y querrá dormir.
Dedícale a tu gato al menos unos 30 minutos en los que pueda jugar contigo, saltando, corriendo y haciendo todo tipo de actividades similares. No solo estará feliz del tiempo que le brindaste para compartir, sino que luego estará dispuesto a dormir unas cuantas horas.
Moldea sus horarios para comer
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Toma en cuenta que tu gato no distingue tiempos del día, pero sí se adecúa a movimientos y por supuesto al hambre que pueda sentir. Adaptarle a un horario de comida que te convenga y optar a una máquina que automáticamente se la colocam según tus ajustes, te ayudará mucho a dormir.
Recuerda también que luego de comer es casi seguro que querrá echarse una larga siesta.
Déjale acceso a varias zonas de la casa
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Esto es clave. Lo importante es que no entre a tu cuarto, ¿cierto? pues una buena forma de lograrlo es permitirle el acceso a otras áreas donde pueda explorar y entretenerse.
Un truco fantástico es darle juguetes que se muevan con el viento, correrle un poco la cortina de una ventana para que se entretenga con la calle o también dejarle pequeños rastros de comida en varios lugares de la casa, por lo que pasará la noche buscándolos y al cansarse se dormirá.
Búscale un compañero
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La decisión de llevar otro gato a tu casa no es tan fácil, porque primero deben adaptar su convivencia, lo cual es un proceso de mucha paciencia. Sin embargo, que tenga un compañero durante la noche evitará por completo que te despierte durante la madrugada.
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