Qué hacer cuando tu esposo no quiere estar con tu familia
Antes que nada deberás primero descubrir por qué tu pareja no quiere estar cerca de tus familiares y luego intentar resolver esta situación con las dos partes dialogando
¿Tu esposo no quiere estar con tu familia? ¿Y sabes por qué? Según el portal Psicología y Mente existen muchísimas causas (o circunstancias) que podrían explicarlo, desde que tus seres queridos no quieren a tu pareja, hasta que no haya nada en común entre ellos, no obstante, independientemente de lo que suceda, es posible mejorar la situación si todos ponen de su parte.
Primero debes prestar atención a las posibles razones por las cuales tu esposo no quiere estar con tu familia, que compartimos por portal Psicología y Mente, y más adelante encontrarás las maneras para solucionarlo.
A tu familia no le gusta tu pareja
Una de las posibles circunstancias que rodeen el hecho de que a tu pareja no le guste tu familia, es que a tu familia tampoco le guste tu pareja.
Esto, evidentemente, muchas veces se nota, y puede ocurrir que tu pareja note que a tu familia no le cae bien, lo que a su vez provoca que se produzcacierto distanciamiento entre ambas partes, o incluso el surgimiento de conflictos.
Es decir, puede ser que no exista feeling entre tu familia y tu pareja, y que ese “desagrado” sea mutuo.
No tienen nada en común
Otra posible circunstancia que rodee la cuestión es que, sencillamente, tu familia y tu pareja no tengan nada en común.
Esto puede hacer que a tu pareja le de pereza asistir a eventos familiar, o que directamente no sienta simpatía por ellos porque nunca han conectado en ningún sentido.
Así, la falta de intereses comunes puede provocar una situación como la que planteamos.
Para tu familia tu pareja es insuficiente
También puede ocurrir que tu familia opine que tu pareja no es suficiente para ti (suficientemente buena, inteligente, rica, lo que sea).Es decir, que opinen que tú mereces algo “mejor”.
Las parejas acaban notando esto, lo que puede originar que tu pareja no sienta tampoco simpatía por tu familia, y directamente “no la quiera”, porque estos pensamientos hacia ella lógicamente le hacen sentir mal (sintiéndose, a su vez, “poca cosa” para su hijo).
Tu pareja siente que tu familia se entromete demasiado
Hay familias políticas más “invasoras” que otras en el terreno emocional de sus familiares; es decir, padres y madres que se meten mucho en las relaciones de pareja de sus hijo/as, y otros/as que les dan más libertad, más vía libre.
En el primero de los casos, puede ocurrir que tu pareja se sienta abrumada por la intromisión de tu familia en la relación, y que dicho agobio sea el causante de que no quiera estar con tu familia (o directamente “no la quiera”).
Cómo mejorar la relación entre tu esposo y tu familia
Si sientes constantemente esta sensación o pensamiento de que a tu pareja no le termina de gustar tu familia, quizás sea hora de plantearte algunos cambios en tu vida, y de ponerte manos a la obra para cambiar la situación, refiere el portal Psicología y Mente.
Debe quedar claro, eso sí, que para ello resulta esencial que tanto tú, como tu pareja, quieran realmente cambiar esta situación y mejorar la relación de tu esposo con tu familia. Es decir, debe haber una motivación e interés real.
A continuación unas pautas o ideas claves que puede poner en práctica tu pareja para mejorar la relación con tu familia (que suelen ser tus padres), y otras que puedes poner en práctica tú mismo/a que compartimos del portal Psicología y Mente.
1. Pautas para la pareja: Ante el pensamiento de que tu pareja no quiere a tu familia hay que plantearse también lo siguiente: ¿cómo puede ella ayudar a cambiar la situación? (además de ti mismo/a). Siempre en el caso de que ella quiera, y de que este camino esté enfocado a mejorar vuestra relación también, si se ha visto afectada por la situación. Estas son algunas pautas:
1.1. Hablar con tu familia: Una primera idea es que directamente tu pareja hable con tu familia. Puede sencillamente acercarse a ella poco a poco, para averiguar si existe algún problema o conflicto de base que ella desconozca, o directamente preguntar.
Dependiendo de las circunstancias y de la confianza, puedes indagar en estas cuestiones o preguntar directamente si tienen algún problema con ella. También puede ser una buena ocasión para acercar posturas, empatizar con la otra parte, escucharse, comprenderse, limar asperezas, etc.
1.2. Organizar alguna actividad juntos: Otra idea es que tu pareja, o los dos (contigo) organicéis alguna actividad o evento para compartir tiempo juntos. Lo ideal sería desarrollarla en un ambiente cálido, ameno y distendido, para que no surjan conflictos y se pueda hablar con total naturalidad de las cosas.
2. Pautas para uno/a mismo: Si quieres ser tú mismo/a quien coga las riendas de la situación y actúe, aquí te dejamos algunos consejos que pueden servirte:
2.1. Hablar con tu pareja: Un primer paso que puedes hacer es hablar directamente con tu pareja de la situación; sobre cómo te sientes al respecto, qué opinas, cómo te está afectando, cómo lo vive ella, etc. Busca un buen momento para hacerlo, y para poder compartir sensaciones, pensamientos o creencias en torno a la situación actual.
Seguramente tu pareja también necesita “desfogarse” y manifestar sus inquietudes y necesidades en este sentido.
2.2. Hablar con tu familia: Más allá de hablar con tu pareja, también puede ser importante que hables con tu familia, y que les expreses lo que sientes en torno a esta situación. ¿Se sienten incómodos con tu pareja? ¿No les gusta? ¿Sienten que tu pareja les rechaza? ¿Cómo lo viven?
Estas son solo algunas cuestiones que puedes plantearle a tu familia, de forma directa o indirecta. El objetivo es que tu familia entienda que para ti, tanto tu pareja como ella son importantes, y que no quieres que la relación con ella perjudique vuestra relación o dinámica familiar.