Miedo al abandono: 5 señales para saber si tu pareja lo tiene
El miedo al abandono se aprende y se condiciona a partir de entornos invalidantes, negligentes o abusivos que enseñan erróneamente a un niño que son prescindibles o que no importan, algo que pasa factura a la hora de buscar pareja
El resultado de nuestra infancia lo vemos al crecer en nuestras relaciones, sobre todo aquellas más intuitivas. Tener miedo a ser abandonado puede causar estragos en las relaciones románticas de una persona, donde pueden parecer «pegajosos» o volverse posesivos o manipuladores, te decimos 5 señales para saber si tu pareja (o tu) lo tienen.
A menudo el miedo al abandono se aprende y se condiciona a partir de entornos invalidantes, negligentes o abusivos que enseñan erróneamente a un niño que son prescindibles o que no importan.
Las personas que lo padecen pueden volverse ansiosos, evasivos o vacilar entre ambos extremos, en un intento por prevenir que sus miedos inevitables afloren.
La doctora en Psicología Annie Tanasugarn, especialista certificada en trauma clínico y relaciones, y consultora que se especializa en ayudar a otros a sanar historias de apego y trauma relacional, explicó en su columna a Psychology Today que cuanto más estrecha e íntima es la relación, más intensos se vuelven los temores de abandono, lo que en última instancia puede conducir a una profecía autocumplida.
Tanasugarn señaló que hay 5 formas comunes en las que el miedo al abandono puede aparecer en las relaciones románticas de una persona:
1. Dificultad para dejar entrar a personas a su vida
Construir muros emocionales para mantener a los demás fuera es el resultado aprendido de que la vulnerabilidad conduce a un mayor abandono.
Entonces, permanecer desapegado y distanciarse de los demás se vuelve autoprotector.
2. Formar “apegos” rápidos
Podrían dar demasiados detalles íntimos sobre ellos mismos demasiado pronto, o compartir información personal con las personas equivocadas con la esperanza de que una relación se acelere. En este patrón, “apegarse” rápidamente a una persona se confunde con conectarse con ella.
Tras este comportamiento hay una herida profunda en la que un niño fue invalidado por sus cuidadores principales en sus años de formación, lo que dejó cicatrices de sentirse invisible y no escuchado, expuso la experta.
3. Historial de abandono de relaciones
Como mecanismo de defensa pueden ser “los que terminan primero” con sus parejas para que no los dejen. Pueden volverse despectivos, discutidores o devaluar a su pareja en un intento de provocar una pelea y «encontrar» una razón para irse.
4. Parejas que no están emocionalmente disponibles
Es el típico cuento del niño que llora y la mamá que lo pellizca. La historia que nos decimos a nosotros mismos de lo que somos y lo que creemos merecer nos hace buscar parejas que se adapten a nuestras definiciones y cuando eso ocurre con alguien con miedo al abandono buscarán personas que los abandonen.
Centrarse en el desafío de conquistar a una pareja emocionalmente desapegada funciona como una distracción de las propias heridas y miedos profundos de la persona, explicó la doctora.
5. Identidad frágil y variable
Las personas con una identidad frágil adoptan los gestos, creencias, pensamientos, sentimientos, opiniones y comportamientos de sus seres más cercanos en un intento por minimizar los temores al abandono.
Este comportamiento resulta en cambios de gustos, pasiones, valores e intereses de una relación a otra, dependiendo de lo que le guste a su pareja.
También te puede interesar: