Me quiero divorciar: 5 razones por las cuales sí deberías hacerlo
La idea de amor romántico que conlleva al matrimonio puede ser bastante dañina en algunos casos porque no contempla la posibilidad de un divorcio
¿Unidos hasta que la muerte los separe? La idea de amor romántico que conlleva al matrimonio puede ser bastante dañina en algunos casos porque no contempla la posibilidad de un divorcio y en ocasiones, todas válidas, es factible decir “me quiero divorciar”. Te decimos 5 razones por las cuales sí deberías hacerlo.
El terapeuta matrimonial y familiar, Steven Ing, se preguntó en uno de sus artículos para Psychology Today ¿qué tan malo tiene que ser un matrimonio antes de que lo dejes?
Reconoció que en general los consejeros matrimoniales no son las personas encargadas de decirte cuánto ya es suficiente de una relación. “Yo, sin embargo, no soy ese consejero, por eso te doy cinco grandes razones para divorciarte”, expresó.
Estos son los cinco criterios que a juicio del experto son razones de peso para culminar con una unión que se esperaba para toda la vida independientemente del supuesto amor que mantienen.
Abuso físico
1
Las agresiones físicas son inaceptables en cualquier relación, mucho menos aceptables lo son en una relación de pareja. El abuso físico por parte de uno o ambos miembros de la relación es una amenaza abierta a la seguridad, la salud y tal vez, incluso la vida.
“Al perpetrar abusos físicos, han renunciado a cualquier derecho moral a la santidad del matrimonio. Están autodescalificados de una consideración posterior. ¡Salir!”, dice Ing.
Abuso emocional
2
Las agresiones no se limitan a los golpes físicos, sino a las palabras malintencionadas o hirientes que en ocasiones pueden tardar más en sanar que las heridas o los moretones.
Se trata de los insultos, las humillaciones, las atribuciones de la culpa, entre otros. “Las parejas que practican, toleran y, por lo tanto, normalizan el abuso emocional soportan sus matrimonios; sin embargo, no prosperan. No te casaste para esto, ¿verdad?”, reflexionó el terapeuta.
Abuso de sustancias
3
Tu pareja tiene algún tipo de adicción a sustancias lícitas o ilícitas que está afectando la calidad de la persona y que puede incluso comprometer cosas más allá de lo emocional, como por ejemplo lo económico.
“Si tu pareja regularmente se da de baja con sustancias, entonces usted está esencialmente solo y, aunque todavía está legalmente casado, ha perdido la esencia de la sociedad”, expuso.
Incapacidad de amar o amarte
4
Hay personas que (¿extrañamente?) no pueden cumplir una de las características de la especie humana: amar. Ing citó al doctor Greg Lester, a su juicio, el más prolífico en el campo de los trastornos de personalidad, quien estima que el 17% de la población general tiene un trastorno de personalidad.
“Pedirles amor es como pedirle a una persona herida que corra un maratón. Simplemente no pueden hacerlo”, dijo.
Pasividad patológica
5
Si tu pareja te hace sentir solo/a a la hora de enfrentar un problema, de abordar una situación que les ataña a ambos o simplemente prefiere quedar bien con otros antes que contigo a lo mejor no son tan incondicionales como deberían.
Es decir, nadie quiere estar discutiendo todo el tiempo, pero al momento de tener inconvenientes hay que resolverlos y no evitarlos. “No son borrachos; no son física o emocionalmente abusivos. Incluso podrían amar, al menos, un poco. Pero cuando se trata de ser un verdadero socio, ellos están ausentes sin permiso y tú estás solo/a”, indicó.
También te puede interesar: