4 peligros de tener una relación de amigos con derechos
Dos expertas en relaciones y sexología mencionaron los peligros emocionales que implica tener una relación de amigos con derechos
La mente humana no siempre se adapta a una relación de amigos con derechos y la clave está en los sentimientos. Crédito: Shutterstock
En pleno 2024, una relación de amigos con derechos luce mucho más habitual que en épocas anteriores. Cada vez son más las parejas que se atreven a tener las llamadas relaciones poliamorosas o no monógamas, sin embargo, siempre puedes correr con algunos riesgos.
La coach Ally Iseman, experta en relaciones donde no se aplica la monogamia (decisión de tener una sola pareja), asegura que los amigos con derechos gozan de una relación «sin imponerle una presión innecesaria y poco realista».
Asimismo, funciona para saltarse ciertos protocolos románticos, como las primeras citas, y la espera acordada del acto sexual. Cuando precisamente hay «derechos», significa que la intimidad es más ligera y abierta. Incluso, el sexo puede darse desde el día uno.
Hasta allí luce genial y deseable, pero desafortunadamente, la mente humana no siempre se adapta a este tipo de relaciones. Y la clave está en los sentimientos. Cuando experimentas celos, juicio ajeno y falta de compromiso, tus áreas emocionales van a manifestarlo, complicando todo el escenario.
4 peligros de tener una relación de amigos con derechos
Tus sentimientos entran a escena
1
A menos que seas una persona fría y en total control de sus emociones, lo que tampoco te garantice que eso no cambie, la relación de amigos con derechos implica un desafío para tus sentimientos.
La coach Suzannah Weiss, sexóloga residente de Biird y autora de Subjectified: Becoming a Sexual Subject, afirma que la honestidad personal es fundamental para que este tipo de relación funcione.
«Si una persona preferiría estar en una relación, pero se conforma con una relación casual, es probable que una o ambas personas salgan lastimadas», analiza.
Al ser «amigos», no hay una relación de fidelidad, a menos que lo hayan acordado. Sin embargo, cuando ese ‘partner’ comience a relacionarse con alguien más, y sientas celos, no tendrías la potestad para reclamarlo.
Podrías perderte de una relación amorosa real
2
Es uno de los mayores peligros que arroja una relación de amigos con derechos, que normalmente se forman cuando dos personas no encuentran a alguien ideal.
Desde el momento en que inicias una relación «amorosa-sexual» con un amigo, estás bloqueando tus posibilidades de conocer y de establecer una relación real con otra persona. Incluso, si alguien se interesa en ti y obtiene información sobre tu estatus emocional, es muy probable que se aleje.
La opinión de los demás
3
Por más que te digan que omitas los comentarios ajenos, no siempre vas a poder controlar que no te afecten. Estas opiniones vendrán de personas que no están de acuerdo con este tipo de relaciones, y al afirmar que desean lo mejor para ti, se sentirá en derecho de intentar guiarte.
«Las presiones y los juicios de fuentes externas, como otros amigos, familiares y la sociedad en general, pueden hacer que se pregunten si deberían convertirse en otra cosa o en algo más», dice la coach Ally Iseman.
Los amigos con derechos son como una ruptura prolongada
4
¡Esto es clave! Cuando inicias una relación de amigos con derechos, automáticamente activas una cuenta regresiva, porque en la mente de ambos está claro que en algún momento puede terminarse.
Asimismo, la sexóloga Suzannah Weiss señala que algunas parejas que rompen su relación deciden convertirse en amigos con derechos. Sin embargo, ella advierte que solo es una ruptura prolongada
«Esto les impide superar la relación, seguir adelante y estar disponibles para los demás, porque básicamente, parece que siguen saliendo», reiteró.
La información contenida en este artículo es solo para fines educativos e informativos y no pretende ser un consejo médico o de salud. Siempre consulte a un médico u otro proveedor de salud calificado con respecto a cualquier pregunta que pueda tener sobre una condición médica u objetivos de salud.
