“Peleo mucho con mi pareja”: un ejercicio terapéutico que pueden hacer para mejorar su relación

La psicóloga Alejandra de Pedro un ejercicio terapéutico por si estás peleando mucho con tu pareja, lo principal es observar cuáles son sus peleas más habituales para tomar nota de cuatro aspectos

Peleo mucho con mi pareja.

Resolver los inconvenientes y puntos de vista diferentes en una relación no tiene por qué ser algo desgastante o conflictivo. Se trata de conversaciones que se dan para atender un interés mutuo o un proyecto conjunto.  Crédito: Pexels

No existen relaciones románticas en las que no haya diferencias, pero a pesar de ello, nadie quiere estar discutiendo de forma regular y descontrolada con su pareja. Te decimos un ejercicio terapéutico qué pueden hacer para mejorar su relación.

Resolver los inconvenientes y puntos de vista diferentes en una relación no tiene por qué ser algo desgastante o conflictivo. Se trata de conversaciones que se dan para atender un interés mutuo o un proyecto conjunto. A propósito de ello, previamente hemos escrito sobre cómo discutir con tu pareja de modo que en vez de desgastarlos, los fortalezca; con qué frecuencia es incluso saludable discutir con tu pareja; y debes tener en cuenta si notas alguna de estas 5 banderas rojas al pelear con tu pareja para salir corriendo de esa relación.

Después de que finaliza la fase inicial de la luna de miel o enamoramiento, puedes sentirte más obligado a hablar sobre algo, lo que puede dar lugar a discusiones. Y si bien las primeras suelen ser incómodas y reveladoras, debido a que notarás facetas que seguramente no viste antes, aquí es donde podrás medir la madurez de tu pareja y la calidad de comunicación.


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El problema de las discusiones radica en que un desacuerdo altere las emociones, se salga de control, y se comiencen a pronunciar palabras hirientes, pero a veces no son tan evidentes.

El punto de tener una buena discusión, y no una mala, es que el problema se solucione, que es lo mejor para los intereses de ambos, ¿no?

No obstante, si están peleando “por todo y por nada”, podrían poner en práctica un ejercicio para autoevaluar las razones que los llevan a discutir todo el tiempo.

La psicóloga Alejandra de Pedro, quien tiene casi 410 mil seguidores y acumula más de 6.2 millones de “me gusta” en TikTok, propuso este ejercicio en función de mejorar tu relación de pareja, si estás pasando por algo similar.

De Pedro explicó que puedes hacerlo por tu parte o comentándolo a tu pareja para que lo hagan en conjunto. Lo principal es observar cuáles son sus peleas más habituales para tomar nota de cuatro aspectos.

1.¿Cuál es el detonante? Las discusiones comienzan por algo. Los detonantes son aquellas cosas o personas que despiertan nuestras inseguridades o malestar emocional estando en pareja. Dependen mucho de cada relación, por ejemplo: que tu pareja está mirando el celular mientras están hablando o que uno critique la manera de conducir del otro.

Lo mejor es reflexionar sobre por qué estas cosas son un detonante para ti. Por ejemplo: que me critiquen mientras conduzco es un detonante porque me recuerda lo críticos que eran mis padres y cómo para ellos nunca hacía nada bien.

2. ¿Cuáles son tus comportamientos de protesta o de protección? Son los actos que hacen en respuesta a los detonantes. La psicóloga explicó que este tipo de conductas buscan reducir el malestar emocional, pero suelen agravarlo. Por ejemplo: si uno no se siente escuchado, puede comenzar a perseguir al otro por toda la casa diciendo cosas hirientes y gritando, eso es un comportamiento de protesta. Una conducta de protección puede ser huir de las discusiones para no enfrentar las diferencias.

3. ¿Cuál es la necesidad subyacente? Cuando discutimos queremos algo a cambio. Se trata de eso que realmente estás buscando cuando llevas a cabo esta conducta de protesta o de protección. Por ejemplo: cuando uno persigue al otro, es buscando que le mire, escuche y entienda lo que está pasando.

4. ¿De qué manera puedo solicitar esa necesidad que subyace de manera menos reactiva? De Pedro indicó que si lo que el otro quiere es atención, pedirlo con tranquilidad o si uno siente la necesidad de huir, tal vez pedir algo de espacio.

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