Una ruptura amorosa sin culpables puede ser más dolorosa: 3 consejos para superarla
Dos expertas en psicoterapia y asuntos de pareja explicaron por qué una ruptura amorosa, consensuada y donde no hay culpables, llega a ser más difícil que un quiebre impulsado por la rabia
Cuando una relación llega a su fin y hay rabia, decepción e impotencia de por medio, generalmente es más sencillo superar la ruptura, porque te han dado motivos. Pero si ambos decidieron separarse, de manera consensuada y sin culpables, podría ser mucho más dolorosa. Por ejemplo, no es lo mismo terminar tras una infidelidad, que hacerlo por distancia o metas diferentes.
Los especialistas en relaciones coinciden en que decirle adiós en buenos términos, a una pareja, es mucho más desafiante que romper en medio de una explosión de emociones negativas.
La coach Christie Kederian, psicoterapeuta y entrenadora de citas, explica que esto ocurre porque «la ira es una emoción más fácil de comprender que la verdadera tristeza».
«A menudo, la ira se describe como la emoción secundaria, cuya raíz es la tristeza. En las rupturas donde no hay culpables, la emoción principal de tristeza es más fácil de acceder que la ira. Es decir, te enfrentas al verdadero dolor de la pérdida», profundizó la experta.
Por su parte, la coach Lisa Lawless, psicoterapeuta especializada en psicología clínica, relaciones y salud sexual, dice que otro factor que atormenta tras romper pacíficamente con alguien es la autoculpabilidad.
El hecho de que no exista un culpable evidente hace que ambos terminen culpándose a sí mismos, mientras que, «cuando hay alguien a quien culpar, es más fácil liberar emociones difíciles».
Todo esto también forma parte de las etapas de un quiebre amoroso, que son hasta 13, incluyendo la posible reconciliación.
3 consejos para superar una ruptura amorosa, consensuada y sin culpables
Establece límites con los amigos en común
Es necesario que ambos se tomen un tiempo para sanar, por lo que compartir seguido en reuniones, con amigos en común, podría ser incómodo.
La coach Christie Kederian aconseja que le expreses a esas amistades que quieres seguir en contacto, pero que prefieres que los encuentros sean por separado.
Además, es necesario que les digas que no quieres escuchar constantemente comentarios sobre esa persona, ni que te mantengan informado de cómo le va o qué pasa en su vida.
«Al establecer límites claros, te das a ti mismo y a tus amigos la oportunidad de respetar tu proceso de curación», dice la experta.
Deja de seguirle en redes sociales
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Tener a tu ex pareja en redes sociales podría hacer que el proceso de ruptura sea más complicado. Lo más recomendable que lo dejes de seguir, al menos hasta que sanes y no sientas la constante necesidad de escribirle o saber de él o ella.
A través de las redes sociales, sin necesidad de eliminar o bloquear, hay opciones para simplemente no ver el contenido que tu ex publica y mantenerle oculto para que no te aparezca en línea.
«Mantenerse en comunicación o revisar sus perfiles en las redes sociales puede crear una percepción inexacta de sus vidas y podría conducir a una cercanía ilusoria», asegura la coach Lisa Lawless.
Sé realista ante posibles reencuentros
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Finalmente, ambas te aconsejan que seas realista con la posibilidad de que se reencuentren en algún momento. La idea es que lo asumas y no te tome por sorpresa emocionalmente.
También tienes el derecho y la potestad de evitar esos encuentros, sencillamente no asistiendo a reuniones y lugares donde hay más probabilidades de que te topes a tu ex pareja.
Aunque te parezca más llevadero una ruptura amorosa donde ambos quedan en buenos términos, la realidad emocional indica otra cosa, así que ten precaución y firmeza en tus decisiones. Esos quiebres sin culpables puede incluso llevarte a ser amigo de tu ex, un escenario que también es peligroso.