Mi jefe me acosa sexualmente y no quiero perder el trabajo: equipo de abogadas te dice qué hacer
Con el aporte del equipo de Womens Law, organizado por abogadas, maestros e intercesores, te orientamos en los pasos que debes seguir si eres víctima del acoso sexual de tu jefe
Para poder buscar una solución a este detestable escenario es fundamental que identifiques cuándo estás padeciendo acoso sexual de tu jefe laboral. Según la Comisión para la Igualdad de Oportunidades en el Empleo de Estados Unidos, son todos los avances no deseados, solicitudes de favores y conductas verbales y físicas que invitan de manera directa o indirecta a un acto sexual informal.
A la definición se le añade que el acoso sexual afecta tu desempeño en el trabajo, la estabilidad de tu puesto y crea un ambiente donde hay intimidación, hostilidad y ofensa.
El equipo de Womens Law, organizado por abogadas, maestros e intercesores, interesados en orientar y ayudar a las víctimas de la violencia doméstica y todo tipo de acoso que afecte la integridad física y psicológica, indican que en una oficina se suele dar un tipo de acoso sexual llamado ‘Quid pro quo’.
Esto significa que las prestaciones de tu trabajo, lo que incluye aumentos de sueldo, un buen puesto laboral, e incluso el riesgo de ser despedida, están sujetas a «ceder a los avances sexuales no deseados de un supervisor o jefe». ‘Quid pro quo’ es un término en latín que se traduce a «una cosa a cambio de otra».
«Solo aplica en casos en los que el acosador es un supervisor, ya que tiene el poder de otorgar o retener prestaciones de trabajo», apuntan las abogadas. E incluso, si llegaras a ceder ante las pretensiones, creyendo que sería la solución o por un beneficio irrenunciable, se continúa consideran como acoso sexual.
¿Y qué hago ante el acoso sexual si no quiere perder mi trabajo?
Dependerá del tipo de compañía en la que trabajas. Si se trata de un sitio donde hay un amplio ‘staff’ de superiores, es más probable que el acosador sea despedido o severamente sancionado, y que tú conserves tu empleo.
Pero si no tienes una instancia mayor a la que acudir, pudieras aspirar a una indemnización por daños y perjuicios, sin embargo, es casi seguro que tendrás que buscar otro trabajo. Debes ser muy realista con tu situación y el escenario. Según las abogadas, esto es lo que debes hacer:
Reúne evidencias
1
Es cualquier grabación mensaje, foto y demás contenido multimedia donde puedas demostrar contundentemente que tu jefe o supervisor está acosándote sexualmente.
Estas pruebas serán vitales al momento de presentar una demanda o quejarte frente al sindicato de la compañía. Los correos electrónicos y toda herramienta tecnológica que guarda respaldo será último para reunir las evidencias.
Busca testigos
2
No necesariamente tiene que ser alguien de tu empresa, pero la idea es que se trate de una persona que pueda tener algún acercamiento. Por ejemplo, que entre a tu oficina intencionalmente después que lo ha hecho tu supervisor.
Tiene que ser alguien de suma confianza, que esté interesado en ayudarte o que incluso haya pasado por una situación similar con la misma persona. Una buena idea es un ex empleado del acosador.
Asesórate con un abogado
3
Si ya tienes pruebas en mano, no vayas donde tu empleador para amenazarle, porque le pondrás en alerta y todo puede terminar en un caos donde estratégicamente te inculpe. Por lo general, estos acosadores sexuales saben cómo moverse cuando son amenazados, así que conserva tus evidencias en secreto.
Lo mejor es que ahora busques la asesoría legal de un buen abogado, especializado en discriminación laboral, y quien te diga cuáles son los pasos a seguir. Probablemente, quiera averiguar más sobre tu jefe y revisar las pruebas para ver cuál es el peso de la demanda o cómo pudiera defenderse.
El último paso es formalizar la demanda, la cual llegará directamente a su oficina o domicilio, según el proceso. Y dependiendo de las pruebas que lo inculpen, es decir, si hay agresión física sexual, amenazas o insultos, tu jefe pudiera quedar detenido por las autoridades hasta que se celebre una audiencia legal.