Libre de culpas: 5 maneras de poner límites saludables en tus relaciones
La psicoterapeuta licenciada y experta en codependencia Sharon Martin expuso 5 cosas que debes tener en cuenta para poner límites saludables en tus relaciones sin culpas
El primer paso es alejarnos de una mentalidad de complacer a las personas que permite que otros dicten lo que es correcto para nosotros y comenzar a priorizar nuestras necesidades. Crédito: Shutterstock
Establecer límites saludables puede ser todo un reto, pero son también una necesidad para todas tus relaciones, del tipo que sean: con tu jefe, con tu familia, con tus amigos e incluso tu pareja. Te decimos 5 maneras de hacerlo sin culpa.
La psicoterapeuta licenciada y experta en codependencia Sharon Martin destacó en su columna para Psychology Today la importancia de los límites saludables: crean relaciones sanas y expectativas claras, nos protegen de ser lastimados y aprovechados, y aseguran que usemos nuestro tiempo, energía y dinero para las cosas que más nos importan.
“Aprender a establecer límites sin sentirse culpable puede ser un desafío, pero es posible. Se trata de cambiar la forma en que piensas sobre ti mismo y tus límites”
Indicó que el primer paso es alejarnos de una mentalidad de complacer a las personas que permite que otros dicten lo que es correcto para nosotros y comenzar a priorizar nuestras necesidades.
En su libro The Better Boundaries Workbook, Martin enumera 6 preguntas para saber si un límite que solicitas es lo mejor para ti:
- ¿Está realmente mal (insertar el límite aquí)?
- ¿Creo que esto está mal o es la creencia de otra persona?
- ¿Le diría a un amigo que está mal (insertar el límite aquí)?
- ¿Mi culpa se basa en expectativas poco realistas de mí mismo?
- ¿Sentirme culpable por (insertar el límite aquí) me ayuda a ser la versión más saludable y feliz de mí mismo?
- ¿Puedo tolerar que alguien esté disgustado conmigo si estoy haciendo lo mejor para mí?
Ahora trabajar para no sentir la culpa puede pasar por aceptar que:
- No son egoístas: la verdad es que son buenos para su salud y bienestar y también benefician a quienes te rodean.
- Fortalecen las relaciones debido a que fomentan la intimidad y la conexión porque crean seguridad emocional que nos permite ser vulnerables. Establecer límites te permitirá tener más energía y paciencia, ser menos reactivo y tener menos resentimientos contra ti mismo y los demás.
- Es bueno para ti y será menos probable que te sientas culpable si recuerdas que todos tienen necesidades y que establecer límites es una forma saludable de satisfacer las suyas. Es decir, vivir en sociedad requiere del límite de que no cualquier persona puede entrar a tu casa y comer tu comida. Aceptarlo contribuye a que sea sana.
- Identifica tus necesidades: saber lo que necesitas es indispensable para tu cuidado personal. La experta sugiere detenerse intencionalmente varias veces durante el día para preguntarse: “¿Cómo me siento? ¿Qué necesito?» Lo que hará más fácil la tarea de establecer límites.
- Debes practicar para sentirte a gusto poniendo límites, porque se trata de una habilidad que se aprende. Puede que se sienta incómodo al principio, pero manténlo.
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