Diabetes: 5 signos en la piel que indican que tienes resistencia a la insulina
Con el aporte del endocrinólogo Salomón Jakubowicz, te explicamos cuáles son las señales que arroja tu piel para indicar que estás presentando una resistencia a la insulina
No esperes a que tu piel arroje todas las señales de resistencia a la insulina para hacerte una prueba de azúcar en la sangre. Apenas detectes el primer signo, inicia los chequeos pertinentes. Crédito: Shutterstock
La diabetes no es una enfermedad que aparece de la noche a la mañana, sino que se va gestando a través de tus hábitos cotidianos y alimenticios, aunque en algunos casos es hereditaria. Por tal motivo es fundamental que aprendas a detectarla y tu piel es capaz de arrojar hasta 5 signos para identificar que tienes resistencia a la insulina, lo cual se considera el inicio de una prediabetes.
El doctor Salomón Jakubowicz, experto endocrinólogo y autor del libro Ni una dieta más, afirma: “La piel es un reflejo de cómo la insulina acelera el crecimiento en todo nuestro cuerpo”.
Si bien no son síntomas imperceptibles, sino que evidentemente están en la piel, podrías asociarlas con otras afecciones y tal vez con “simples rarezas” de tu cuerpo. Pero no te conformes con solo verlas, acude con un especialista y permite que te practiquen todas las pruebas pertinentes.
La diabetes es una afección que muestra irregularidades, ya que los niveles de azúcar suben y bajan en tu torrente sanguíneo. Incluso hay frutas como los arándanos que pueden bajarla en cuestión de 15 minutos, y otros trucos similares como comer arroz recalentado.
Con el aporte del doctor Jakubowicz, te guiamos en las señales que tu piel arroja para identificar que tu cuerpo se está resistiendo a la insulina y puedas actuar a tiempo para prevenir la diabetes.
Los 5 signos en la piel que te informan sobre resistencia a la insulina
Verrugas en el cuello
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También llamados acrocordones, se trata de crecimientos benignos en la piel que, al no tener una asesoría médica, puedes confundirlo con simples verruguitas que aparecen en el cuello.
Su presencia es un reflejo del sobrepeso y los cambios hormonales que se producen cuando tienes una resistencia a la insulina, apuntó el doctor Salomón Jakubowicz.
Líneas marcadas en el cuello
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Generalmente, le ocurre a personas con sobrepeso y es una especie de línea agrietada que se forma en toda la circunferencia del cuello, sobre todo en la parte posterior.
En algunos casos más pronunciados puede ser visualmente desagradable y jamás debe confundirse con una resequedad con una simple resequedad en la piel.
Coloración oscura en algunas zonas de la piel
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Según Mayo Clinic, esta afección o trastorno cutáneo asociado a la resistencia a la insulina se conoce como acantosis pigmentarias (acantosis nigricans).
Consiste en una coloración oscura que se produce en distintas zonas de tu piel, sobre todo en aquellas donde hay menor exposición al sol, lo que crea confusión al detectar esta señal.
El cuello, las axilas, detrás de las rodillas, los pies e incluso la piel que rodea la vagina, en algunos casos femeninos, son áreas que pierden la coloración normal y se vuelven más oscuras.
Lunares rojos en la piel
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Son producto del crecimiento anormal de pequeños vasos sanguíneos, una señal de resistencia a la insulina que se manifiesta en la piel por el descontrol hormonal que estás padeciendo.
Pliegue en los lóbulos de la oreja
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Probablemente, es uno de los signos más evidentes, ya que se origina cuando la resistencia a insulina ha permanecido durante mucho tiempo.
La razón de este pliegue es que el crecimiento de la parótida (glándulas salivales), debido al desequilibrio hormonal, lo que empuja la oreja hacia adelante formando un pliegue.
Si estás presentando uno o más signos de resistencia a la insulina, no esperes a que aparezcan otros. Lo fundamental es que acudas con un especialista para diagnosticar y tratar tu caso. Es probable que seas sometido a pruebas de sangre, entre otros estudios, además de modificar tus hábitos alimenticios.
La información contenida en este artículo es solo para fines educativos e informativos y no pretende ser un consejo médico o de salud. Siempre consulte a un médico u otro proveedor de salud calificado con respecto a cualquier pregunta que pueda tener sobre una condición médica u objetivos de salud.
