Cómo la comida chatarra puede llevarte a una ruptura amorosa: estudio lo explica
Una encuesta arrojó que 1 de cada 3 estadounidenses asegura que si su pareja consumía demasiada comida chatarra sería un motivo de ruptura
Cuando la pareja comparte la misma perspectiva sobre la comida chatarra, no hay problema, de lo contrario los conflictos pueden ser muy serios. Crédito: Shutterstock
Esa rebanada de pollo frito, la grasienta hamburguesa o esa tentadora porción de papas fritas son integrantes de la comida chatarra que ya no solo te dejan en riesgo de obesidad y enfermedades cardiovasculares, sino que también pueden llevarte a una ruptura amorosa. ¿Pero cómo es esto posible?
El doctor Craig Miller, psicólogo y cofundador de Academy Labs, afirma que la alimentación en pareja y comer juntos «es un lenguaje del amor». Esto significa que la comida de uno u otro es importante para ambos, y que al haber una diferencia nutricional se pueden producir conflictos que llevan a la separación.
De acuerdo a una encuesta publicada en OnePoll, a más de 2,000 personas, 1 de cada 3 estadounidenses aseguró que si su pareja comía demasiada chatarra sería un motivo de ruptura. Asimismo, el 49% de los participantes dijo que ocasionalmente consumían este tipo de alimentos, pero un 38% desea que su pareja no haga lo mismo.
Esto sin contar que, según otro estudio, el 79% de los estadounidenses desea que su pareja baje de peso.
La diferencia de perspectivas sobre la comida chatarra te puede llevar a la ruptura amorosa
Cuando se dice de forma simple: que la comida chatarra puede arruinar tu relación amorosa, suena rebuscado o exagerado. Pero si lo analizas un poco te darás cuenta que las diferencias en los estilos de alimentación, uno conservado y otro descuidado, fácilmente te lleva a fuertes conflictos.
Imagina que unes a un gordito, amante de los hot dogs, con una dietista. O quizás piensa en cómo se la llevaría una mujer a la que no le importa ganar kilos a base de comida con un hombre de pensamientos fitness. Sonaría muy perfecto decir que el amor «tiene cabida para todo», pero la realidad es que aquí hay un lenguaje amoroso muy distinto y eso atrae problemas.
«Un compañero puede sentirse cohibido por su aumento de peso y tener menos confianza, lo que puede generar discusiones o tensión», explica el coach Greg Fleming, fundador del sitio de citas Mint Date.
Cuando existen objetivos opuestos respecto a la alimentación, lo que incluye el tipo de comidas que debes o no consumir, se pueden producir resentimientos entre la pareja.
«Quien no está aumentando de peso puede sentir resentimiento hacia la pareja que lo está, especialmente si ellos mismos están tratando de comer de manera saludable», asegura Fleming.
Todo esto sin contar los efectos negativos que la comida chatarra puede tener en la salud, perjudicando incluso las funciones físicas sexuales. «Por ejemplo, puede conducir a una peor salud cardiovascular, lo que ejerce presión sobre la intimidad. También provocaría afecciones como la disfunción eréctil, que afecta aún más la vida sexual de una pareja», concluyó el coach.
