Tatuarte el nombre de tu pareja: 5 razones por las que NO deberías hacerlo
Al tatuarte el nombre de tu pareja u otro diseño alusivo a la relación estás asumiendo un compromiso con tu cuerpo y no con esa persona, como muchos pensarían
Seguramente es uno de los gestos más románticos en una relación amorosa, pero tatuarte el nombre de tu pareja también implica un gran riesgo. Las «hormonas del amor» son capaces de hacerte tomar decisiones de un momento a otro, teniendo seguridad de que esa persona estará para siempre y que incluso estaría dispuesta a tatuarse contigo. Pero lo más recomendable es que te lo pienses.
Además de la inversión económica, que en este caso no es tan importante, al tatuarte el nombre de tu pareja u otro diseño alusivo a la relación estás asumiendo un compromiso con tu cuerpo y no con esa persona, como muchas pensarían. Y no está de más decirte que no debes permitir que alguien te incite a hacerlo solo por «amor» o «diversión».
Las 5 razones por las que NO deberías tatuarte el nombre de tu pareja
Dicen que es de mala suerte
1
Creer en la mala suerte o no es cosa de cada quien, pero muchas lenguas afirman que tatuarte el nombre de tu pareja es marcar el fin de la relación en un futuro. Lo dicen incluso los que alguna vez se tatuaron hasta la inicial de esa persona que fue especial.
Quizás esto sea falso, pero si eres de los que se aferran a las supersticiones, entonces es mejor que te lo pienses.
No hay vuelta atrás
2
Es la razón más evidente, porque un tatuaje implica marcar tu piel para siempre. Claro, podrías agregarle tinta y editar el significado de un tatuaje, porque hay quienes han convertido un corazón en el cuerpo de una araña.
¿Y si esa relación se acaba?
3
Tatuarte el nombre de tu pareja no indica que tu relación amorosa durará para siempre, pero sí representa el riesgo de luego no saber qué hacer con el diseño si esa historia llega a terminarse.
Este es el principal motivo por el que muchas personas desisten de la idea e incluso ven el nombre de la pareja como algo prohibido para tatuarse.
Y si tomas la decisión, al menos trata de hacértelo en un lugar discreto o poco visible.
Pones en riesgo tus recuerdos
4
Imagina que esa relación termina, y quizás no en buenas condiciones, por lo que ahora cada vez que te miras al espejo sientes rabia, tristeza o un profundo arrepentimiento. Tatuarte el nombre de tu pareja puede ser muy romántico, pero es un riesgo garantizado a tu salud emocional.
No le gustará a una nueva pareja
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¡Obvio! No esperes que tu nueva novia esté feliz de ver el nombre de «Camila», «María», «Carlos» o «Michelle» en tu antebrazo o en el centro de la espalda.
Aunque no implica una razón para que tu pareja decida no continuar contigo, podría causar bastante incomodidad y deberán trabajar en ello.
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