Pacientes recuperados de COVID-19 tienen mayor riesgo de sufrir miocarditis, según los CDC

Luego de analizar los resultados de un seguimiento, los CDC confirmaron que los pacientes recuperados de COVID-19 tienen un riesgo mayor de sufrir miocarditis, en comparación con quienes se vacunan contra el virus

Miocarditis

Los CDC apuntaron que los hombres mayores de 50 años y los niños menores de 16 eran más propensos a la miocarditis. Crédito: Freepik

Desde hace meses se habló sobre la posibilidad de desarrollar inflamación cardiaca o miocarditis tras la aplicación de las vacunas de Pfizer y Moderna, sobre todo después de la segunda dosis. Sin embargo, ahora son los pacientes recuperados de COVID-19 quienes realmente tienen un mayor riesgo de padecer la afección, según datos expuestos por los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC).

Luego de hacer un seguimiento a un periodo de 10 meses y analizar los resultados, los CDC encontraron que el riesgo de miocarditis después de la infección de COVID-19 es mucho mayor, con 146 casos por cada 100,000 habitantes en Estados Unidos. También apuntaron que los hombres mayores de 50 años y los niños menores de 16 eran más propensos a la afección.

Las cifras de los CDC superan incomparablemente a las publicadas en la revista The New England Journal of Medicine, donde un estudio del Clalit Health Services, la organización de atención médica más grande de Israel, arrojó que el riesgo de desarollar miocarditis después de la vacunación era de 2.13 casos por cada 100,000 vacunados.

Cabe destacar que ninguna de las investigaciones señala que el riesgo de miocarditis aumente o disminuya dependiendo de la variante que origine la infección de COVID-19.

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Cuán grave es la miocarditis tras la recuperación de COVID-19

En este punto los números no son muy alentadores, pero siguen siendo bajos. Según datos publicados en el Journal of the American Heart Association, el 5% de los pacientes recuperados de COVID-19 mueren de miocarditis o requieren trasplante de corazón un después del diagnóstico.

Por su parte, más del 80% de los casos de inflamación cardiacada NO relacionados a la infección o vacunación de COVID-19 se resuelven de manera espontánea.

La gran mayoría de las personas que desarrollan miocarditis después de la vacunación tienen una condición leve y se mejoran rápidamente. En números más precisos, el 95% de los casos en adultos y el 98.6% en niños están totalmente fuera de peligro. Nunca se informó sobre algún fallecimiento o la necesidad de soporte cardiaco mecánico.

Los expertos consideran necesario que cada paciente recuperado de la infección por COVID-19 preste atención a la salud del corazón, y en especial a los siguientes síntomas:

1. Dolor torácico repentino

2. Acidez estomacal

3. Dolor abdominal

4. Náuseas

5. Espasmos repentinos en el brazo

6. Fluctuación de la presión arterial

7. Tos

Otra investigación realizada por la Universidad de Oxford informó que muchos pacientes completamente recuperados de COVID-19 desarrollaron hipertensión, miocarditis y debilidad en los latidos del corazón.

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