8 maneras de aumentar tu deseo sexual

Son muchos los factores que influyen en el desarrollo de la libido, tanto internos, como externos

22 de julio de 2022 - 19:21

El deseo sexual o la libido es como una temperatura que se mide con un termómetro ficticio que todos llevamos dentro, pero en ocasiones esa “calentura” puede verse disminuida. Te decimos 8 maneras de aumentarla.

Son muchos los factores que influyen en el desarrollo de la libido, tanto internos, como externos: las hormonas, el estado mental, el estrés, la función cerebral y los patrones de comportamiento, etc.

No todas las personas tienen el mismo apetito sexual, cada una es diferente e incluso es capaz de fluctuar en el tiempo. Cabe destacar que no existe un estándar universal o una regla general cuando se trata del deseo sexual.

Por tanto, la “falta de apetito sexual” será un problema en cuanto se le considere como uno. En general, hay algunas recomendaciones de expertos en función de aumentar tu deseo sexual:

Reducir los niveles de estrés: tener altos los niveles de cortisol puede hacer que no te provoque nada de intimidad, y que no quieres nada de nada, ni solo/a ni en pareja. Reducir o manejar el estrés puede ser difícil, pero no imposible consiste en atender esas preocupaciones o entender que hay cosas que no se pueden cambiar. Hablar con un amigo puede ser útil, pero un terapeuta es incluso mejor, ya que como profesional de la salud te dará herramientas que te permitan lidiar con cada situación.
Identifica qué te excita: saber qué es lo que te gusta y lo que te “pone en el mood” es indispensable para aumentar tu libido intencionalmente. Como todo puedes practicarlo y llegado cierto punto, puedes hasta condicionar a tu cerebro para que en determinadas ocasiones reacciones a esos estímulos. Ampliar la definición de lo que significa sexo puede ser útil. Si no estás emocionado/a por el tipo de sexo que ha tenido, probar algo nuevo puede ser emocionante.
Descansa bien: El sueño afecta muchos aspectos de su salud, incluido el deseo sexual. Si no estás durmiendo bien probablemente no tengas mucha libido y no puedas conseguir orgasmos (sobre todo si eres mujer). Cuidar tu higiene del sueño debe ser prioridad para poder descansar lo suficiente y tener disposición para otras actividades.
Atender las consecuencias negativas: un posible embarazo, una potencial enfermedad de transmisión sexual, una variante del COVID, son muchas las preocupaciones que te pueden asaltar al momento de buscar momentos de sexualidad, pero te pueden estar contrarrestando tu deseo. Abórdalas usando la protección respectiva y tomando las precauciones correspondientes.
Considera la terapia hormonal: si eres mujer y estás teniendo la menopausia puedes considerar tratarla para que tus hormonas estén un poco más estables. La sequedad y la atrofia vaginal pueden hacer que las relaciones sexuales sean dolorosas, pero los parches, geles, aerosoles y medicamentos hormonales pueden ayudar.
Incluye los afrodisíacos: en la Medicina Natural se recomienda a las personas con falta de apetito sexual incluir en su dieta alimentos y especias tradicionalmente usados como afrodisíacos en diferentes culturas como el aguacate, plátano, pepino, chocolate, albahaca, pimientos, miel, ajo jengibre, higos, regaliz, nuez moscada, piñones.
Prueba hierbas para el deseo sexual: el ginkgo biloba es un poderoso antioxidante que mejora la circulación y aumenta el suministro de oxígeno al cerebro y los órganos sexuales; la Epimedium, es una hierba con propiedades afrodisíacas; la raíz de maca es otra hierba que se recomienda para aumentar la energía, la líbido, la resistencia y el rendimiento sexual en hombre y mujeres; la damiana es otra hierba recomendada porque estimula el sistema nervioso y actúa como afrodisíaco y tónico para los órganos reproductores.
Limita el alcohol: de acuerdo con algunos estudios, las mujeres tienen menos lubricación y mayor dificultad para alcanzar el orgasmo después de beber, y por su parte, los hombres pueden tener menos sensación en sus genitales.