Cómo mantenterte fresco ante el intenso calor del verano: 7 consejos de expertos
Con el aporte de algunos especialistas, te ofrecemos hasta siete consejos para mantenerte fresco e hidratado durante el intenso calor del verano
Los ventiladores y aires acondicionado son grandes aliados para frenar el calor durante el verano, así que no dudes en utilizarlos. Crédito: Shutterstock
Luego de tres meses primaverales, con escasas lluvias y ambientes agradables, las temperaturas del verano comienzan a elevarse en Estados Unidos. Por tal motivo, es momento de que empieces a aplicar estrategias para mantenerte fresco, y si estás con personas mayores recuerda que el calor extremo puede afectarles severamente.
Con la ayuda de expertos en la materia, te ofrecemos algunos consejos para frenar el calor que haya dentro de tu casa, cómo sentirte más fresco, hidratado y qué hacer cuando estés en las calles.
7 tips de expertos para mantenerte fresco durante el intenso calor del verano
Apártate de los rayos del sol
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Esta es una recomendación directa de la instructora Cheryl Nelson, experta en preparación de desastres naturales y certificada por la Agencia Federal para el Manejo de Emergencias (FEMA).
Si en tu casa no has podido controlar la temperatura y hace mucho calor, visita lugares donde haya ambientes más frescos o incluso aire acondicionado, como una biblioteca o un centro comercial.
Utiliza un ventilador de techo
2
Para favorecerte con este aparato, lo correcto es que pongas a girarlo en sentido contrario a las agujas del reloj. Según la instructora Nelson, solo así el aire es empujado hacia abajo creando una brisa fresca.
«Si tiene suficiente hielo, ponga el hielo en una bandeja y colóquelo frente a un ventilador (no de techo). El aire que sopla sobre el hielo ayudará a enfriar su espacio», aconseja la experta.
Consume alimentos que te hidraten
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La hidratación durante los días más calurosos es fundamental, pero no solo te conformes con beber agua y otros líquidos, también hay alimentos que te hidratan de forma maravillosa.
«En una ola de calor recomiendo comer pepinos, apio, lechuga, fresas y melones», mencionó Cheryl Nelson. Incluso las sopas también ayudan, por su contenido de sodio, pero un día caluroso suena contradictorio.
Reduce tus porciones de comida
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El doctor Mark Conroy, médico de urgencias del Centro Médico Wexner, de la Universidad Estatal de Ohio, explica que la principal razón por la que debes comer porciones más pequeñas durante el verano es: «La digestión calienta el cuerpo».
«Es mejor comer un desayuno más abundante cuando todavía hace frío, y una cena más abundante más tarde por la noche, cuando también hace más fresco», añadió el especialista.
Enciende el aire acondicionado
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No tiene que ser todo el día, sino en las horas más calurosas, de modo que la cuenta del servicio eléctrico tampoco implique un golpe a tu bolsillo.
El aire acondicionado es el electrodoméstico más efectivo para alejar el calor producido por el sol, tal como la estufa o la leña que empleas durante el invierno.
Controla la temperatura dentro de la casa
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En caso de que no tengas aire acondicionado, hay algunas estrategias que puedes accionar en casa para que controlar la temperatura.
La instructora Cheryl Nelson aconseja que durante la noche mantengas las ventanas abiertas para ventilar y lo mejor es que duermas en el nivel más bajo de la casa, ya que el aire frío tiende a bajar y el caliente sube.
Aunque parezca contraproducente, abrir las ventanas podría generar más calor durante el día, porque estás esperando un viento que simplemente no ocurre. Lo mejor es que las mantengas cerradas y enciendas los ventiladores.
Toma duchas frescas, no frías
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Esto es clave, ya que las duchas frías no te aportan ningún beneficio, al contrario, te ponen en peligro.
«Si te bañas con agua fría inmediatamente después de estar en el calor, pueden ocurrir cambios rápidos en tu frecuencia cardíaca, presión arterial y frecuencia respiratoria», advierte Cheryl Nelson.
En este sentido, la experta aconseja tomar duchas frescas y luego aplicar otros «trucos» como: aplicar compresas de hielo en la cabeza, el cuello, las muñecas y otros puntos del pulso para mantenerte en temperatura agradable.
Nunca subestimes el calor durante la época de verano. Si vas a la calle, protégete de los rayos del sol con un paraguas, busca caminos donde haya sombra y de ser posible toma el transporte público o vehículos con aire acondicionado. El calor extremo puede alterar tu pulso, provocar náuseas, calambres musculares, mareos, fatiga y dolor de cabeza.
