7 cosas que debes enseñar a tus hijos para prevenir que abusen de ellos físicamente
Debbie Maniowicz, periodista, escritora y doula, compartió desde su Instagram 7 cosas que debes inculcarle a tus hijos para que no abusen de ellos físicamente
Además de enseñarles que no deben aceptar gestos y cosas que no les agrada, también debes afirmarles que siempre vas a creer en su palabra. Crédito: Shutterstock
A cuaquier edad de su infancia tus hijos e hijas pueden estar en riesgo del abuso físico. Pero cuando entran en una etapa donde entienden y razonan con mayor capacidad, quizás a los 4 o 5 años, ese es el momento preciso en que debes enseñarles a detectar gestos y acciones de otras personas que NUNCA tienen por qué permitirlas.
Debbie Maniowicz, periodista, escritora y doula (asistente profesional para el trabajo de parto), compartió a través de su cuenta en Instagram 7 enseñanzas que puedes inculcarle a tus hijos para evitar que abusen de ellos físicamente.
Además de mencionar las pautas, la experta escenifica cada una utilizando muñecas o su propio cuerpo. Esto para facilitar el aprendizaje en caso de que lo ven niños y niñas, y también para extender el mensaje a pequeños con discapacidad auditiva.
Las 7 cosas que debes enseñarle a tus hijos para que NO sean víctimas del abuso físico
Nadie puede tocarte en tus partes íntimas
1
Absolutamente nadie, incluyendo papá o mamá, tienen por qué tocar al niño en sus partes íntimas. Debbie Maniowicz agrega que, asimismo, ninguna persona puede pedirle que muestre sus genitales.
Y tampoco otras parte del cuerpo si no quieres
2
Si el niño o niña NO quiere, nadie tampoco tiene por qué tocarle en otras partes de su cuerpo, en este caso las visibles, como el cabello, las manos, las orejas y la boca.
Nadie te puede hacer cosquillas
3
Los juegos de cosquillas con niños pueden ser delicados, ya que implica tocar zonas sensibles como el cuello, las axilas y el estómago. Por tal motivo la experta recomienda a los padres que enseñen a sus hijos que nadie debe hacerlo si no les parece divertido.
Lo mismo ocurre con juegos como «upa, upa», que consiste en cargar y agitar al niño o los abrazos forzados.
No tienes que ver a adultos desnudos
4
Ver a un adulto desnudo, incluyendo a papá y mamá, nunca debe ser un hábito normalizado para un niño. Cuando esto ocurre, el pequeño o pequeña no diferencia de lo que es permitido o incorrecto.
Por tal motivo la enseñanza de Debbie Maniowicz es «nunca puedes ver a una persona adulta desnuda».
No tienes por qué guardar secretos maliciosos
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A menos que se trate de algo infantil, como un regalo para otro pequeño o alguna sorpresa de esta característica, los niños no tienen por qué saber y mucho menos guardar secretos que les puedan hacer daño o que impliquen algo malo.
Por ejemplo, que alguien del círculo de amistad familiar le diga que le gusta su mamá, pero que no diga nada. Este tipo de informaciones no son bien digeridas por niños.
Nadie debe besarte por la fuerza ni pedir que lo hagas
6
Esto es típico de familiares como tíos y algunos abuelos, que obligan a los niños a que los saluden con un abrazo o un beso. Incluso les amenazan con no visitarlos más o le ofrecen una sorpresa a cambia del «cariñoso» gesto.
Debbie Maniowicz señala que bajo ninguna circunstancia el niño o niña debe ser forzado. «Solo le tienes que dar besos a quien tú quieras», aconseja la periodista y escritora.
Siempre voy a creerte
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Y finalmente un sello de confianza para que, ante cualquiera de los escenarios anteriores, el niño o niña sienta la seguridad de contarte si algo indebido ha pasado.
Es común que ciertos adultos no creen a sus hijo por pensar que podrían estar confundidos o tergiversando la información. Pero recuerda: un niño nunca miente en estas condiciones.
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