Consejos para reforzar tu alimentación con magnesio sin químicos
Este nutriente aporta fortaleza a los huesos y ayuda al buen funcionamiento de los músculos; incluirlo en la dieta es cada vez más importante a medida que pasa el tiempo
El magnesio es un elemento químico que ayuda al cuerpo a realizar numerosos procesos. Este nutriente está presente en alimentos de origen vegetal, principalmente en las verduras de hoja verde, en legumbres y frutos secos.
Los expertos recomiendan siete alimentos que contienen este nutriente para consumir después de los 50 años, cuando se hace más importante que nunca cuidar qué ingerimos.
Según el National Institute of Health de los Estados Unidos, consumir alimentos que tengan magnesio es importante para fortalecer los huesos.
Además, regula el funcionamiento de los músculos, ayudar al cuerpo a procesar el azúcar y bajar la presión arterial, entre otros beneficios.
El magnesio es el cuarto mineral más abundante en el organismo, justo por detrás del calcio, el sodio y el potasio.
Beneficios del magnesio a través de los alimentos
Este se encuentra almacenado de forma principal en los huesos, la musculatura y los tejidos blandos (tendones, vasos sanguíneos, nervios o estructuras fibrosas, entre otros).
Su presencia en la dieta es fundamental, ya que ejerce múltiples funciones. Como señalan desde la Escuela de Salud Pública de Harvard, es necesario para que unas 300 enzimas del cuerpo lleven a cabo sus funciones. Algunas de estas son:
- Construcción de proteínas.
- Formación de los huesos.
- Funcionamiento normal de la musculatura.
- Modulación de la presión arterial.
- Regulación del azúcar en sangre.
¿Cuáles son los síntomas de que me hace falta magnesio?
La mayoría de las personas con deficiencia de magnesio no son diagnosticadas, porque los niveles de magnesio en la sangre no reflejan con precisión cuánto de este se almacena realmente en las células.
Además hay que mencionar que las señales de que los niveles de magnesio son bajos solo se vuelven evidentes cuando se tiene una deficiencia.
Los síntomas incluyen debilidad, pérdida de apetito, fatiga, náuseas y vómitos.
Pero los síntomas que presentes y su gravedad dependerán de cuán bajos sean tus niveles de magnesio.
Si no se controla, una deficiencia de magnesio se asocia con un mayor riesgo de ciertas enfermedades crónicas, incluidas las enfermedades cardiovasculares, la osteoporosis, la diabetes tipo 2, la migraña y la enfermedad de Alzheimer.
Si bien cualquiera puede desarrollar una deficiencia de magnesio, ciertos grupos corren más riesgo que otros, incluidos niños y adolescentes, personas mayores y mujeres posmenopáusicas.
Trastornos como la enfermedad celíaca y la enfermedad inflamatoria intestinal, que dificultan que el cuerpo absorba los nutrientes, pueden hacerlo más propenso a la deficiencia de magnesio, incluso con una dieta saludable.
Las personas con diabetes tipo 2 y los alcohólicos también tienen más probabilidades de tener niveles bajos de magnesio.
¿Dónde podemos encontrar el magnesio?
Los principales alimentos que contienen magnesio y puedes incluir en tu dieta sin problema son los siguientes:
- Almendras.
- Garbanzos, judías blancas y guisantes.
- Espinacas.
- Maíz.
- Chocolate negro.
- Sardinas en conserva.
- Aguacates.