Por qué no debes usar toallitas húmedas para limpiarte en el baño
El doctor Kubrat Sajonia Coburgo, coloproctólogo y experto en cirugías de patologías anales, aconseja que en el caso de que necesites usarlas, sea solo puntualmente y no un hábito
Aunque siempre estén a tu disposición, hay usos con las toallitas húmedas que no son recomendables. Crédito: Shutterstock
A pesar de que su uso podría ser mucho más cómodo que el papel higiénico o el agua (que es lo más óptimo), usar toallitas húmedas para limpiarte en el baño podría traerte consecuencias a largo plazo. Además de provocarte problemas en la piel anal, también son dañinas para el medio ambiente, pues no son biodegradables.
El doctor Kubrat Sajonia Coburgo, coloproctólogo y experto en cirugías de patologías anales, aconseja que en el caso de que necesites usarlas, sea solo puntualmente y no un hábito.
También asegura que un gran número de pacientes que atiende con problemas de purito anal, picor o dermatitis anal, usan seguido las toallas húmedas. De hecho, existen 5 errores que las personas cometen al utilizarlas y pueden exponerte a bacterias y hongos.
Todos los compuestos que contienen las toallitas húmedas quedan alojadas en el ano
La razón principal por la que no son recomendadas por profesionales de la salud es debido a los alergénicos que contiene, tales como aceites, perfumes y alcohol.
En este sentido, el doctor Kubrat Sajonia Coburgo aclara que cuando te lavas con agua y jabón, te mojas, te enjabonas y luego te sacas el jabón. Sin embargo, con las toallitas húmedas no pasa lo mismo. Al pasártela, quedan allí todos esos compuestos que podrían causarte daños.
Otro ejemplo es que imagines que tu cabello se seque con el champú aplicado. Con el paso del tiempo, seguramente causará problemas a tu cuero cabelludo. Lo mismo ocurre con las toallitas húmedas, provoca irritación y otros problemas más complicados en la zona anal.
Lo más recomendable es que, si no deseas usar papel higiénico, porque te irrita, tienes la opción del agua, si es posible sin jabón.
Y un defecto final de las toallitas húmedas es que, por la sensación de «limpieza» que te deja en las manos, sobre todo por el perfume, podrías confiarte en que no es necesario lavarte las manos. Allí es donde también te expones a un gran peligro.
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La información contenida en este artículo es solo para fines educativos e informativos y no pretende ser un consejo médico o de salud. Siempre consulte a un médico u otro proveedor de salud calificado con respecto a cualquier pregunta que pueda tener sobre una condición médica u objetivos de salud.
