Parejas que no tienen una luna de miel después de casarse son menos felices, revela encuesta
Más de 1,000 estadounidenses casados desde hace 11 años, participaron en la encuesta que demostró la importancia de tener tu luna de miel después del matrimonio
Si bien puedes planificar viajes con tu pareja después del matrimonio, el efecto de la luna de miel es único e irrepetible. Crédito: Shutterstock
Hay parejas que posponen su luna de miel, o deciden no tenerla, por motivos económicos o quizás para destinar el dinero a otros proyectos: la hipoteca de una casa, comprar electrodomésticos, etc. Sin embargo, esa dulce etapa después del matrimonio demuestra ser más importante de lo que imaginabas.
Un sitio web llamado ‘Honeyfund’, y que registra lunes de miel realizadas por cientos de parejas, encuestó a más de 1,000 estadounidenses casados desde hace 11 años, para conocer cuál es el impacto que ese viaje romántico causó en el futuro del matrimonio.
Según los resultados, el 59% de las parejas que sí se fueron de luna de miel calificó su estatus relación como «excelente». Pero esta cifra se comparó con aquellas que no vivieron ese «mágico» momento, donde solo el 35% indicó estar satisfecha con la relación matrimonial.
Aunque la luna de miel no es indispensable justo después de casarte, sí es fundamental que no se olvide y puedas gozarla más adelante, en un tiempo no muy lejano. La encuesta de ‘Honeyfund’ señala, además, la importancia de compartir tiempo de calidad con tu pareja, alejados al menos un fin de semana de las responsabilidades laborales e incluso de los hijos.
Otros estudios curiosos apuntaron también que el dinero que gastas en tu boda puede aumentar o reducir el riesgo de divorcio. Lo mismo ocurre con el hecho de tener un hijo justo después de casarte, que según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC), también el riesgo de que tu matrimonio dure menos.
El recuerdo de la luna de miel combate contra los altibajos del matrimonio
La doctora Carla Marie Manly, psicóloga clínica y experta en bienestar con sede en el condado de Sonoma, California, asegura que tanto la luna de miel como otros viajes durante el matrimonio «son un impulso muy necesario para la felicidad general y la satisfacción con la vida».
«El hecho de planificar un viaje juntos puede crear una energía estimulante que une a las parejas, ya que les da algo que esperar», afirmó la experta.
Asimismo, restó importancia al destino del viaje y destacó que lo importante son «los recuerdos creados».
«A medida que las parejas se mueven juntas a través de los altibajos de la vida, el puro recuerdo de la luna de miel, de las maravillas que se experimentaron juntos, puede ser extremadamente edificante y conectivo», aseguró la doctora Carla Marie Manly.
Finalmente, recomendó que cada viaje (incluyendo la luna de miel) sea elegido por ambas, de modo que «honre los deseos y necesidades de cada uno». Esa decisión como pareja también va a fortalecer su capacidad de compromiso, algo que indudablemente impacta en la salud del matrimonio.
