5 hábitos mentales para mantener la motivación y lograr tus metas
Con demasiada frecuencia, establecemos aspiraciones audaces que pocas veces logramos
No es casualidad que enero sea el mes del año con más suscripciones a gimnasios y planes alimenticios para bajar de peso, es un lugar común para la mayoría de las personas. Sin embargo, esas suscripciones poco se mantienen en el tiempo por falta de hábitos. Crédito: Pexels
Los principios siempre son una oportunidad perfecta para nuevos comienzo y nuevas metas, durante el primer mes de este año es usual que las personas se replanteen sus hábitos, pero muchos saben que dentro de unas semanas o meses “no podrán” continuarlos. Puede ser útil conocer estos 5 hábitos mentales para mantener la motivación y lograr tus metas.
No es casualidad que enero sea el mes del año con más suscripciones a gimnasios y planes alimenticios para bajar de peso, es un lugar común para la mayoría de las personas. Sin embargo, esas suscripciones poco se mantienen en el tiempo.
Establecer metas es realmente bueno para la salud mental y la satisfacción con la vida. Pero con demasiada frecuencia, establecemos aspiraciones audaces que pocas veces logramos. Finalmente, puedes terminar decepcionado porque crees que no eres capaz de hacer lo que te propones.
No obstante, es cuestión de determinación y constancia. Por ello te explicamos 5 hábitos mentales para mantener la motivación y lograr tus metas:
1.- Reestructúrate de manera cognitiva
Los terapeutas en psicología cognitivo-conductual utilizan la reestructuración cognitiva para ayudar a sus clientes a cambiar su perspectiva.
La doctora en Psicología Yvonne Thomas explicó a Yahoo! Life que consiste en identificar cómo y cuándo tus pensamientos pasan de la alegría a la tristeza y luego reformular esos pensamientos.
Por ejemplo, cuando decides comer sano y en algún momento sucumbes a la tentación de ordenar una pizza. En lugar de aceptar que eres humano, y que a veces tienes antojos, adoptas un comportamiento de «todo o nada». Así que renuncias a la meta por completo.
Este es un hábito común, pero no es saludable ni útil.
Ya ahí has identificado un “problema”, la segunda parte de la reestructuración cognitiva va de intentar cambiar estos pensamientos por otros más realistas.
Siguiendo con el ejemplo anterior, esto podría verse como, «Realmente disfruté la pizza y espero con ansias mi nutritiva avena y fruta por la mañana», en lugar de, «He fallado en mi resolución y seguiré adelante». nunca tener éxito».
Todo se trata de equilibrio, nadie puede comer verduras al vapor para la cena todo el tiempo.
"Si puede modificar su forma de pensar para ser más saludable, existe una mayor probabilidad de mantenerse motivado y comprometido"
2.- Haz de tu meta algo emocionante
El psiquiatra Jeffrey Ditzall afirma que debes enamorarte de tu meta. Si su objetivo no es algo que te entusiasme para lograrlo, puede convertirse en un desafío, porque no esperas con ansias el trabajo diario que se necesita para alcanzarlo.
El especialista recomienda tener estímulos visuales en lugares que veas todos los días, con la intención de sentirte inspirado para tu misión.
"Esencialmente, estás tratando de poner en marcha las vías de placer de la dopamina del cerebro para impulsar el rendimiento. Puedes revisar y modificar la visión de lo que estás tratando de crear para continuar haciéndolo emocionante y novedoso para la mente"
3.- Hacer de una gran tarea, pequeñas tareas
Cuando piensas en una meta sobre algo que deseas desarrollar puede ser muy desafiante si te dices a ti mismo: quiero bajar de peso, quiero ser más ordenado, quiero remodelar mi casa.
Por el contrario identifica qué tareas pequeñas y diarias puedes hacer para conseguir tu objetivo: el que caso de bajar de peso, pueden hacer 45 minutos de ejercicio diario; en el caso de la organización, determinante a dejar la cocina limpia y recogida cada noche; y para la remodelación, podrías comprar cada semana un implemento que requieras.
"Al dividir esto en porciones más pequeñas, hay más posibilidades de que intente abordarlas y también termine sintiéndose más seguro y motivado para hacer lo siguiente”
4.- Dale un propósito positivo a tus metas
Identifica el “¿por qué?” de tu meta, probablemente no quieras solamente bajar de peso, sino verte y sentirte mejor contigo mismo lo que mejorará tu confianza y tu actitud ante la vida.
"Enfocarse en su identidad y su autopercepción con una lente de autocompasión es una excelente manera de mantenerse motivado"
Stensby explica que incluso si el objetivo en sí mismo no cambia, la forma de pensar y la motivación para establecerlo afecta su probabilidad de apegarse a él. Aquí está un ejemplo:
«Estoy tan arruinado y soy malo para ahorrar dinero, hay algo mal en mí» puede convertirse en algo como «Quiero aprender a frenar gastos innecesarios y ahorrar para las cosas que amo en el futuro».
Ambas frases se orientan a encontrar una mejor manera de administrar tus finanzas, pero ¿cuál crees que pueda ser la más efectiva?
5.- Hazte el trabajo fácil
Hacerte el trabajo fácil se trata de hacer “el trabajo de preparación”. Es decir, facilítate las cosas eliminando los posibles obstáculos.
Si quieres comer más sano, prepara comida y déjala lista en la nevera para evitar ordenar a domicilio cuando se trata de un apuro.
Si quieres beber más agua, ocupa un termo grande y llévalo contigo a donde vayas.
¡Ánimo! Es cuestión de hábitos mantener la motivación y lograr tus metas
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