Diabetes: el mango puede ayudar a reducir niveles de azúcar en sangre en 45 minutos
Los hallazgos de un estudio avalado por la la Sociedad Estadounidense de Nutrición sugirieron que comer mangos reduce la velocidad a la que aumentan los niveles de azúcar en la sangre
Los mangos son un refrigerio beneficioso para aquellos que buscan perder peso o tienen una afección médica en la que es fundamental estabilizar la respuesta glucémica posprandial. Crédito: Pexels
El mango puede ayudar a reducir niveles de azúcar en sangre en apenas 45 minutos, avaló la Sociedad Estadounidense de Nutrición.
Esta información resulta útil para aquellas personas que padecen de diabetes tipo 2, son prediabéticas o tienen antecedentes familiares de la enfermedad y prefieren cuidarse.
El estudio examinó a 23 adultos obesos y con sobrepeso que consumieron 100 Kcal de mango fresco o galletas bajas en grasa isocalóricas en dos ocasiones distintas.
Los investigadores evaluaron las muestras de sangre basal y postprandial, es decir, en ayunas y 45 minutos después de las comidas.
Los hallazgos sugirieron que comer mangos reduce la velocidad a la que aumentan los niveles de azúcar en la sangre.
Observaron que tanto el mango como el consumo de galletas bajas en grasa aumentaron la glucosa y la insulina con un aumento significativamente menor en los mangos en comparación con las galletas bajas en grasa a los 45 minutos posteriores al consumo de bocadillos.
“Los mangos ayudan a mantener estables los niveles de glucosa e insulina en la sangre después del consumo”
Dicha conclusión sugiere que los mangos son un refrigerio beneficioso para aquellos que buscan perder peso o tienen una afección médica en la que es fundamental estabilizar la respuesta glucémica posprandial.
Una dieta basada en plantas puede ser más efectiva para controlar el nivel de azúcar en la sangre para las personas que padecen o tienen predisposición a la diabetes tipo 2.
Esto debido a que los alimentos como las verduras sin almidón, varios tipos de frutas, semillas, nueces y frijoles tienden a tener un índice glucémico bajo, y hay menos posibilidades de que aumenten los niveles de azúcar en sangre cuando se consumen.
Si estás considerando cambiar tu tipo de dieta por razones de salud y/o éticas es oportuno que acudas con un nutricionista que pueda ayudarte a planificar una transición óptima.
Recuerda que los alimentos de origen vegetal pueden tener un contenido de nutrientes más bajo que los productos de origen animal. Sin embargo, con una planificación adecuada es posible proporcionar al cuerpo todo lo que necesita.
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