Pavo de Thanksgiving: a qué temperatura debo cocinarlo y cómo saber cuando está listo

Si es la primera ocasión en la que te animas a preparar tu propio pavo de Thanksgiving, al terminar el proceso te darás cuenta que no es algo complicado, pero sí tiene algunas técnicas y pasos precisos. Y como no queremos que tu festividad acabe al estilo Rachel Green, con un postre inglés relleno con carne, vamos a enseñarte dos elementos fundamentales: a qué temperatura debes cocinar el pavo y cómo saber cuándo realmente está listo.

Lo más tradicional en Estados Unidos es preparar un pavo entero al horno, por lo que la primera norma vital es precalentarlo, a una temperatura de 160 °C. Esto lo vas a hacer una vez que el pavo esté descongelado y mientras armas toda la preparación.

A qué temperatura debes cocinar tu pavo de Thanksgiving

Luego que el pavo está listo para ser ingresado al horno, hay que reajustar el poder de cocción. Desde el portal Comedera te recomendarmos seleccionar una temperatura de 170 °C y el tiempo se determina por su peso: 15 minutos por cada medio kilo. Es decir, si tu pavo pesa seis kilos, lo correcto es cocinarlo durante 3 horas exactas (180 minutos).

Lo mismo ocurre con el tamaño del pavo y las porciones que vas a servir en la mesa. Para elegir las cifras correctas, multiplica el número de personas por 600 gramos. Por ejemplo, si son 10 familiares o invitados, lo ideal es que el pavo no pese menos de 6 kilos.

Otro punto que debes tomar en cuenta al momento de hornearlo es si se trata de un pavo relleno. En este caso, el guiso debe cocinarse aparte y antes de introducirlo. Nunca debe asarse dentro del pavo, ya que se resecará esperando que los ingredientes internos estén listos.

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¿Y cómo saber cuándo está listo?

A menos que seas una persona con experiencia en pavo de Thanksgiving, lo recomendable es que te ayudes con un termómetro de horno para saber cuándo realmente está listo para retirarse.

De acuerdo a Butterball, lo correcto es insertar la punta en la parte gruesa de un muslo y sin tocar algún hueso o cartílago. Tu pavo estará listo cuando el termómetro indique las siguientes temperaturas:

– Muslos: 180 °F (82 °C)

– Pechuga: 170 °F (77°C)

– Relleno, en caso de que lo tenga: 165 °F (74 °C)

Los expertos sugieren que el pavo debe supervisarse unos 30 o 60 minutos antes de que finalice su cocción. Y en el tiempo restante se le echa un vistazo cada 15 minutos, siempre para cuidar que no se queme o se dore más de lo deseado.

También es muy importante que cumplas con el tiempo de reposo luego de sacar el pavo del horno. Dependiendo de su tamaño pueden ser 15, 30 o hasta 40 minutos. La espera quizás sea engorrosa, pero si sigues las recomendaciones al pie de la letra, servirás en tu mesa una comida perfectamente preparada.

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