Prevención del Alzheimer: una porción de nueces al día puede ser beneficioso
Tan solo 40 gramos de nueces contribuirán a mejorar la función cerebral, gracias a su combinación única de sustancias vegetales que son ricas en antioxidantes para prevenir el Alzheimer
Una porción de nueces al día puede ser beneficiosa para prevenir la enfermedad del Alzheimer, debido a que a estos frutos secos se les atribuye la mejora de la salud cerebral a medida que envejeces.
Tan solo 40 gramos contribuirán a mejorar la función cerebral, gracias a su combinación única de sustancias vegetales que son ricas en antioxidantes.
Además, están llenas de grasas omega-3 y pueden combatir la inflamación del cerebro asociada a la demencia.
Los estudios han demostrado que los polifenoles, la vitamina E y las grasas poliinsaturadas en las nueces pueden detener el daño oxidativo y reducir dicha inflamación, reseñó Express.
Un estudio que analizó la enfermedad de Alzheimer encontró que la alimentación de ratones con nueces observó mejoras «significativas» en sus niveles de cognición, memoria y ansiedad, reseñó el medio.
Asimismo, consumir nueces está relacionado con niveles más bajos de colesterol, con estudios que sugieren que comer alrededor de 40 gramos por día podría reducir su lectura.
No obstante, esta información no se debe interpretar como que una porción de nueces al día previene directamente el Alzheimer.
La mejor manera de reducir el riesgo de demencia es adaptar varios aspectos de su estilo de vida que incluyen: reducir al mínimo o erradicar el consumo de alimentos ultraprocesados, hacer actividad física con regularidad, no fumar y mantener niveles normales de presión arterial y colesterol.
De la misma manera, el consumo de canela puede reducir el riesgo de padecer alzheimer, comprobó un estudio de la Universidad de California en Santa Bárbara.
Los científicos concluyeron que los dos compuestos que se encuentran en la canela, el cinamaldehído y la epicatequina, han mostrado algunos resultados prometedores en la prevención del desarrollo de la enfermedad de alzheimer, reseñó The Advocate.
Dichas sustancias inhiben la formación de los “nudos” filamentosos que se encuentran en las células cerebrales que caracterizan la enfermedad, en la que una proteína compuesta de fibras retorcidas (ovillos) llamada tau se forma dentro de las células moribundas.
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